El reconocimiento de la figura de Carles Puigdemont como president legítimo se votará en el Parlament el próximo jueves 1 de marzo. El presidente de la Cámara, Roger Torrent, convocará el pleno para esa fecha después de que este viernes se haya reunido la Mesa y la Junta de Portavoces, que ha introducido en el orden del día la propuesta de resolución registrada por JxCat.
El debate servirá, por tanto, para hacer este actos simbólico de legitimación que los independentistas querían llevar a cabo a cambio de hacer una investidura efectiva de un candidato alternativo, tras constatar los impedimentos impuestos por el Constitucional a la reelección del president cesado. En medio de las diversas tensiones en la negociación entre JxCat y ERC, los primeros han registrado este viernes una propuesta de resolución para legitimar a Puigdemont sin acuerdo con los republicanos.
Al pleno llegarán también otras tres iniciativas parlamentarias, de C's, PSC y CatComú, y una cuarta del PP que podría incluirse en los próximos días. Todas ellas buscan votaciones con el objetivo de que se desbloqueen los plazos hacia la repetición electoral. Los letrados de la Cámara aseguraron que, tras las medidas cautelares impuestas por el TC contra la candidatura de Puigdemont, los dos meses de plazo hacia la disolución automática del Parlament no habían comenzado, tras lo cual abrieron la puerta a que el pleno pusiera el reloj en marcha aprobando por mayoría la constatación del bloqueo institucional.
Así lo intentarán los partidos de la oposición, después de que Ciutadans forzase esta semana la convocatoria de un “pleno del desbloqueo” gracias a su control sobre el 20% de los diputados. Con todo, la mayoría absoluta de los independentistas puede hacer que ninguna de estas iniciativas sea aprobada. ERC y la CUP no llevan, por el momento, ninguna propuesta.
La legitimación presidencial de Puigdemont es una de las iniciativas con más posibilidades de éxito, pese a que el texto no ha sido pactado por los tres grupos independentistas. Sin embargo, una vez reconocida simbólicamente a Puigdemont se abriría la posibilidad de una investidura alternativa, que tanto ERC como diversos sectores de JxCat promueven. La negociación sobre el nuevo diseño del Govern ha entrado en fase final estos días y, según fuentes de la negociación, la presentación del pacto no tardará en llegar tras este pleno.