Conflicto a la vista en Barcelona. El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha mantenido la suspensión acordada el pasado 19 de julio del reglamento aprobado por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) que restringía la actividad de Uber y Cabify. La decisión ha soliviantado al sector del taxi después de la huelga de 48 horas para reclamar el mantenimiento de la norma. Ahora los taxistas debatirán si declararse en huelga indefinida.
En un auto, la sección 3 de sala contenciosa-administrativa del TSJC ha mantenido la suspensión de la entrada en vigor del reglamento aprobado por el AMB, que preside la alcaldesa Ada Colau, prevista para el próximo 1 de agosto. El tribunal da la razón así a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, que había reclamado esta medida cautelar.
Los magistrados no son ajenos en su resolución al conflicto y a la “repercusión social” que ha creado la suspensión del reglamento. Señalan los togados que si bien el sector del taxi “puede resultar gravemente afectado” por la competencia de los vehículos que operan con licencia VTC, los titulares de estas autorizaciones también “pueden verse seriamente perjudicados” de permitir la entrada en vigor del nuevo reglamento de Colau, que limitaba las licencias VTC (con las que operan Uber o Cabify) a una por cada 30 taxis.
En cualquier caso, el TSJC subraya que la clave no está en quien resulta más perjudicado con el reglamento, sino en si el AMB es la administración competente para regular las licencias VTC. Y la respuesta es negativa, pues la competencia es estatal. “El AMB carece de competencia para reglamentar la intervención del arrendamiento de vehículos con conductor VTC y, por consiguiente, para imponer una autorización añadida a la estatal. Menos aún para reglamentar la intervención y regular las autorizaciones necesarias con efectos retroactivos y limitar el número total de autorizaciones”, argumenta el auto.
El tribunal indica que la AMB sí tiene potestad reglamentaria y de intervención administrativa en relación con el taxi, pero no respecto del arrendamiento de vehículos con conductor. “Hoy por hoy no resulta posible asimilar los servicios del taxi y los prestados por los vehículos VTC”, añade el TSJC, negando el carácter de competencia desleal que el taxi atribuye a Cabify o Uber.
Pero además de aceptar las medidas cautelares de la CNMC, el TSJC advierte del futuro incierto del reglamento de Colau que el taxi aplaudió y que consideró su tabla de salvación frente a las nuevas plataformas. Así, el tribunal avanza que “muy probablemente” el reglamento de Colau para frenar las licencias VTC “no se le podrá reconocer validez” en la futura sentencia sobre el caso.
La huelga de 48 horas del taxi que ha finalizado este viernes ha generado problemas de movilidad en Barcelona. Los ataques de algunos taxistas contra conductores de Cabify, condenados por las asociaciones del taxi, provocaron que el miércoles las plataformas anunciaran que dejaban de operar en Barcelona. Este viernes tanto Uber como Cabify ya operan con normalidad en la capital catalana.