Los colegios de médicos catalanes advierten a sus miembros contra las terapias pseudocientíficas
Consejo de Colegios de Médicos de Catalunya (CCMC) ha dado este jueves la voz de alarma contra las terapias pseudocientíficas, principalmente en los enfermos con cáncer. En una rueda de prensa en la que han presentado un documento con recomendaciones, el presidente del CCMC y del Col·legi de Metges de Barcelona (COMB), Jaume Padrós, ha hecho una clara advertencia a sus miembros colegiados, recordando que han abierto 5 expedientes a médicos por aplicar terapias llamadas “alternativas”.
En el documento presentado, elaborado conjuntamente con la Sociedad Catalano-Balear de Oncología y la Sociedad Catalano-Balear de Cuidados Paliativos, los colegios recuerdan a los médicos sus obligaciones de informar rigurosamente sobre las terapias alternativas -como la homeopatía o la acupuntura- sin evidencia científica.
Las organizaciones profesionales advierten de que un incumplimiento de los deberes legales y deontológicos del médico a la hora de trasladar al paciente información supone “una infracción muy grave que puede implicar la inhabilitación profesional”. Así, recuerdan que de los cinco expedientes abiertos uno de ellos se cerró con la inhabilitación del médico.
“La función primordial de los Colegios de Médicos es velar por la defensa del ejercicio de la medicina adecuado a las buenas prácticas”, aseguran en una nota de prensa. Por ello, el documento de posición trasladado a los facultativos recuerda la especial vulnerabilidad del paciente de cáncer, al “estar sometido a un elevado sufrimiento e incertidumbre”.
Informar al paciente de los riesgos
Entre las recomendaciones que lanzan observan que la obligación de los médicos es informar al paciente “sobre los beneficios esperados de los tratamientos que disponen de la mejor evidencia disponible”. Esta información, enumeran, debe ser “rigurosa, comprensible, medida, prudente y esperanzadora, sin crear, sin embargo, falsas expectativas”.
Si bien el Consejo recuerda la obligación de respetar derechos del paciente, como el de no querer ser informado o el de rechazar total o parcialmente un tratamiento, alertan de que estas situaciones no pueden ser pretextos para que los facultativos acepten “la mentira, el engaño o la confusión”. Por ello, reclaman que antes de que un paciente abandone un tratamiento con evidencia científica sea informado de las consecuencias previsibles que su decisión podría acarrear.
Recuerdan asimismo que el médico “no puede utilizar procedimientos ni prescribir medicamentos con los que no esté debidamente familiarizado y que no estén basados en la evidencia científica o en la eficacia clínica, aunque el paciente lo consienta o lo solicite”. Tanto es así que si el médico detecta que al paciente se le están recomendando terapias sin base científica deberá comunicarlo al Colegio.
Por último subrayan que algunas terapias complementarias pueden suponer en ocasiones “una ayuda para que los enfermos puedan hacer frente a la enfermedad”. Por ello, “es deseable que estos procedimientos ofrezcan integrados en el mismo equipo de oncología o de cuidados paliativos que trata al paciente. Su supuesta inocuidad no justifica la indicación de cualquier terapia sin evidencia científica o eficacia clínica dándole la apariencia de tratamiento validado”, advierte la nota.