¿Habrá campamentos de verano este año? ¿Cómo serán las colonias? ¿A qué podrán jugar los niños y niñas y a qué no? Al mismo tiempo que se dan prácticamente por descartadas las clases presenciales este curso, la Generalitat prepara junto con las entidades sociales cómo deberán ser las actividades de ocio infantil en verano para evitar contagios. Entre algunas de las medidas que se barajan estaría evitar el uso de tiendas de campaña y reducir los grupos a entre seis y ocho niños.
Así consta en el documento Actividades de ocio en verano, un borrador de trabajo elaborado por la Secretaría de Salud Pública de la Generalitat que ha circulado entre las entidades del sector. Se trata de una serie de recomendaciones desde esta semana se discuten en grupos de trabajo de la Administración con los agentes del sector, con lo que están sujetas a cambios.
Entre las propuestas más llamativas, destaca que los técnicos de Salud Pública no ven claro el uso de tiendas de campaña –con ocupaciones de entre cuatro a seis niños– para los campamentos. “No reúnen las condiciones mínimas para poder garantizar las medidas de higiene y de distanciamiento físico de los participantes”, recoge el documento. Sí lo hacen las casas de colonias y los llamados casals, como se denominan los programas lúdicos y educativos de verano en Catalunya.
Aun así, desde la patronal del sector Acellec advierten que esto no supone que se vayan a descartar los campamentos este verano. “Con determinadas medidas creemos que sería posible, estamos trabajando en ello con la Administración”, asegura el presidente de esta asociación, Pep Montes.
La gran mayoría de recomendaciones que estudia Salud Pública son muy parecidas a las que se dan en otros sectores respecto al distanciamiento y a la higiene, pero aplicadas al ocio infantil. Se recomienda que se haga el mayor número posible de actividades al aire libre y que los grupos de niños y niñas sean reducidos, de 6 o 8. Cada grupo tendría asignado uno o dos monitores en función de la edad y se debería intentar que estos sean siempre los mismos.
De cara al distanciamiento físico, plantean que las entradas y salidas de los recintos donde se hagan las actividades se lleven a cabo de forma “escalonada”, en intervalos de 15 o 20 minutos. También que haya dos metros entre mesas de comedor, que se hagan comidas por turnos, y que en las estancias fuera de casa se prioricen las habitaciones pequeñas y con baja ocupación.
El documento llega al detalle de proponer algunas actividades que sí cumplirían de entrada los requisitos de distanciamiento, como son las excursiones y el senderismo, los deportes de agua, los de raqueta (como tenis o ping-pong), las actividades de danza y algunos juegos de pelota en los que pueda haber distancia.
Y de cara a fomentar los hábitos de higiene entre los niños y niñas, da algunas pautas en función de la edad. Con los de 3 a 5 años, propone que se usen muñecos para ejemplificar conductas como toser en el codo y que se recurra a canciones de 20 segundos para que se adapten a la duración del lavado de manos.