El comité de TV3 se encierra en la sede de la CCMA contra la petición de 7 años de cárcel a un compañero
Los componentes del comité de empresa de TV3 han encerrado en la sala de reuniones de la dirección de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA). Los sindicalistas reclamaban una reunión con los máximos representantes del ente a los que piden la retirada de la acusación contra un trabajador de la televisión para el que solicitan 7 años de cárcel por, presuntamente, revelar datos sobre los salarios de la plantilla.
La acción de los trabajadores se produce después de la segunda jornada de huelgas parciales en TV3 en favor de su compañero. Antes, el comité había hablado con el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, el expresident, Artur Mas, la presidenta del consejo de gobierno de la CCMA, Núria Llorach, y varios dirigentes de Convergència, sin conseguir ningún compromiso sobre el caso.
Desde el comité se ha dicho varias veces que si la dirección de la CCMA retirarse la acusación, el caso quedaría sin efecto. Para afirmarlo se basa en dos informes legales solicitados por los representantes de los trabajadores. Las movilizaciones de los compañeros del trabajador de TV3 se han acrecentado, porque la fecha del juicio se ha fijado para el 30 de junio.
La delegación del comité de empresa de TV3 se ha presentado a las 10 de la mañana en la sede de la dirección del ente después de la huelga de 10 minutos realizada entre las 8 y las 8:10 de la mañana. Han pedido entrevistarse con los consejeros para explicarles el caso. En ese momento el consejo de gobierno debía comenzar una reunión ordinaria. La entrevista entre trabajadores y el consejo no ha sido posible. La mayoría de los consejeros ha salido de la sala. Sólo han restado dos: Pep Vilar, nombrado a propuesta del PSC, y Rita Marzoa, nombrada en la cuota de ERC. Y sin embargo, Vilar ha reprochado a los sindicalistas la forma como habían realizado la acción.
Los trabajadores de TV3 se han sentado en la sala de reuniones y han manifestado estar a la espera de ser recibidos por el consejo de gobierno de la televisión pública.
Roser Mercader, presidenta del comité de empresa, ha declarado a El Diari del Treball: “esperamos poder hablar con el consejo, para nosotros no sería ningún problema no hablar ahora, sólo queremos un compromiso de ser recibidos lo antes posible”. Fuentes de los encerrados han indicado que algunos de los consejeros de la CCMA se han ido del edificio, “no sabemos si es una medida de protesta por la intransigencia de la dirección, o simplemente porque tenían que estar en otro lugar”, afirman.
El origen del caso
El 1 de agosto de 2012 un mensaje enviado presuntamente desde el correo electrónico del presidente del consejo de la CCMA, Brauli Duart, se recibió en todos los buzones del correo interno del ente. Adjuntaba una hoja de cálculo con los datos de todos los trabajadores, sueldos y cálculos de los costes de sus despidos. Una información que había sido pedida antes por el comité de empresa y que desde la dirección se negó que existiese.
La información causó un gran estruendo e interpretaciones contradictorias. Desde entenderlo como un globo-sonda de la dirección, hasta verlo como una acción para desvelar un secreto atesorado por la cúpula de la televisión pública catalana. La corporación encargó una investigación policial para localizar al autor de la filtración. Durante 14 meses los trabajadores de TVC fueron escrutados en una investigación de la que se desconocen los límites.
En octubre de 2013 los Mossos entraron por sorpresa en casa de un empleado de TV3. Revolvieron durante horas y requisaron un ordenador. Después detuvieron al trabajador y durante 72 horas fue interrogado. Al salir estaba acusado de “descubrimiento y revelación de secreto”, ambos cargos relacionados con la filtración de la información sobre el ERE que se preparaba en la CCMA.