Tres trabajadores han muerto en un accidente en una mina de Súria (Barcelona) de ICL Iberia, la antigua Iberpotash. Un desprendimiento ocurrido antes de las 9:00h. ha sido la causa del siniestro laboral en esta explotación con más víctimas desde 1987. Las labores de identificación se han realizado tras el rescate de los cuerpos de las víctimas, que se ha prolongado siete horas.
Las tres víctimas tenían alrededor de 30 años. Dos eran geólogos en plantilla de ILC, y uno de ellos además estaba realizando el máster de la Escuela de Ingeniería de Manresa de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC). La tercera víctima también era alumna del máster y estaba realizando las prácticas en ICL Iberia en el marco de un convenio de cooperación educativa.
La profundidad de la mina, de unos 900 metros, y el propio desprendimiento que ha causado el accidente han complicado las labores de rescate, que no obstante se han podido finalizar este jueves por la tarde. También se ha realizado la identificación de las víctimas, según ha confirmado el president de la Generalitat, Pere Aragonès, quien se ha desplazado hasta la mina.
El accidente se ha producido en una rampa subterránea de 5 kilómetros de longitud que se inauguró en 2021. Las primeras hipótesis apuntan a que se ha tratado de un desprendimiento de liso, la cara plana y extensa de la roca. Los tres fallecidos, que realizaban labores rutinarias de revisión de la mina previas a la perforación, han quedado atrapados, pero otros trabajadores han podido salir y ya han sido evacuados.
En la mina de Iberpotash en Súria trabajan entre 800 y 900 personas en distintos turnos. En el momento del accidente el turno estaba conformado por entre 200 y 300 empleados. Para evitar los desprendimientos en las minas, una de las causas más habituales de accidentes laborales, se emplea la técnica del bulonaje, que consiste en anclajes metálicos y una malla también metálica para soportar el techo de la galería.
El conseller de Empresa, Roger Torrent, ha avanzado que el último control laboral en la mina se realizó hace tres semanas y se cerró con un resultado satisfactorio, sin tener que abrir ningún expediente sancionador. Iberpotash es uno de los mayores empleadores de la comarca del Bages y las minas de potasa de Súria se han convertido en el centro de su operativa después que la Justicia le obligara a descontaminar varios pozos de agua de la zona afectados por la actividad minera.
Los sindicatos exigen seguridad
Por parte de los sindicatos, CCOO, con representación en la empresa minera, ha lamentado el accidente y ha pedido “depurar las posibles responsabilidades”. “Exigimos a la dirección de ICL Iberia que haga un correcto mantenimiento de las instalaciones de la mina para garantizar la seguridad de todas las personas que trabajan en ella”, ha reclamado la central.
En un comunicado, CGT ha recordado que son ocho los fallecidos en el sector minero de la comarca del Bages en la última década, tragedias siempre “injustificables” y “en la inmensa mayoría debido a la codicia empresarial”. “No somos estadísticas, somos trabajadores y trabajadoras muriendo por ir al trabajo”, ha apostillado el sindicato.
Para encontrar un accidente laboral en las minas Súria con tres víctimas mortales hay que retrotraerse al 27 de febrero de 1987, cuando otros tres mineros murieron al desplomarse 150 toneladas de mineral sobre ellos. El último accidente laboral grave en las mismas instalaciones ocurrió en el año 2013, cuando dos trabajadores perdieron la vida al desprenderse un bloque de roca de grandes dimensiones de las instalaciones de Cabanasses. Más recientemente, en 2020, dos trabajadores perdieron la vida en dos accidentes ocurridos en tres semanas de diferencia en una mina de Iberpotash en Balsareny cerrada el mismo año.
En el siglo pasado, destacan como otros grandes accidentes mineros el ocurrido en 1975, cuando 30 personas perdieron la vida en una explosión de grisú en una mina de Fígols (Barcelona), así como el sucedido 20 años después por el mismo motivo en el pozo de San Nicolás (Mieres, Asturias), de la empresa Hunosa, en el que fallecieron catorce mineros.