Queremos conocer, potenciar y explorar las ventajas y contradicciones de toda una red de nuevos proyectos que utilizan Internet para visibilizarse y desarrollarse de manera sostenible y para el bien común. Canal de economía social, por Pau Llop y Goteo.org
Los Vulnerables: una multitud que arde en el combate de la vida
Imaginad una multitud girando alrededor de un fuego invisible, imaginad una multitud invisible atravesando un fuego visible. Imaginad a una multitud, que pese a haber sido mutilada, camina, habla, grita, retrocede, se oculta y es ocultada. Imaginad a una multitud que arde en el combate de la vida. Dicen que entonces los vieron por primera vez y que tras ellos se erigía un escudo que los hacía invencibles. Eran: Los Vulnerables.
De esta forma se presenta la 15ª edición del Festival ZEMOS98: Los Vulnerables, que se celebra durante toda esta semana, del 8 al 13 de abril, entre el Centro de las Artes de Sevilla y algunos otros espacios de la ciudad.
Los Vulnerables, profundiza en la idea CopyLove: Procomún, amor y remezcla, que tuvo su germen en la pasada edición del Festival. Una oportunidad para abandonar nuestro frenético y patológico ritmo y adentrarnos en los afectos, los procesos de interdependencia, el hamor (con h de dejarse habitar), la ayuda mutua y los desahogos y cuidados sin los cuales es imposible imaginar una vida en común. Todo un imaginario que compone una ontología de la que emerge con fuerza la 'cuidadanía', armada con todas las vulnerabilidades que la sociedad productiva entiende como debilidades, como fallas para el rendimiento del sistema; cuando en realidad son aquello desde lo que hacernos fuertes y avanzar en la igualdad desde la diferencia; son las acciones y actitudes que sin ser parte de la economía formal, conforman el suelo que pisamos y esconden la promesa de una vida que merezca la pena ser vivida.
Los procomunes invisibles
Y es que estamos totalmente infectadas por el virus de lo productivo. Incluso desde nuestros propios colaboratorios, intentando desarrollar prácticas contrahegemónicas, muchas veces (demasiadas) nos dejamos llevar por la fiebre del 'más y mejor'. Seguimos apostando por la efectividad en vez de por la afectividad, por los procomunes en el sentido productivo y no en el reproductivo.
Relegamos a un segundo plano los procomunes invisibles, todos esos vínculos, prácticas, fetiches y recursos no-monetarios, modos de hacer que (para bien o para mal) hemos asimilado en nuestro hacer colectivo y que hacen sostenible la vida en común. Recursos invisibles o invisibilizados. Invisibles porque los hemos interiorizado como parte 'natural' de nuestra práctica; invisibilizados desde una doble vía: tanto por el régimen desarrollista en el que vivimos que a menudo ignora aquello que hace la vida vivible, como por una estrategia ¿deliberada / retórica / simplemente incapaz de ser otra? de ocultación y potencia frente a los poderes establecidos. Sea como sea, en todos los casos, de manera consciente o inconsciente se produce un problema de desvalorización y deslegitimización.
Por eso es tan importante el reto que se marcan Los Vulnerables. Esa especie mutante (que somos todas) que trata de desarrollar al máximo toda la potencialidad de eso que nos han dicho (y nos hemos creído) que teníamos que esconder. Un monstruo colectivo que se enfrenta a las ambivalencias de 'poner la vida en el centro', que se mira hacia dentro y se hace preguntas como ¿Cuáles son las normas, vínculo y prácticas que, pese a no estar escritas, con forman la cultura corporativa y median las relaciones dentro de la comunidad? ¿Qué monedas que no son dinero circulan dentro de los grupos? ¿Son los procomunes invisibles homogéneos o cuando menos podemos tratar de extraer ciertos patrones comunes? ¿Podemos vivir y gestionar nuestras vidas superando las trampas del biopoder? ¿Debemos desvelar estos procomunes o es necesario que en cierta medida permanezcan ocultos e invisibilizados?
Los Vulnerables son una Godzilla ciudadana
Ocultos o expuestos, estos procomunes invisibles son la verdadera y desatada fuerza que surge un cuerpo colectivo que está detrás de la 'cuidadanía'. Un cuerpo antihegemónico y autónomo que celebra su diferencia sintiéndose monstruoso, fuerte, poderoso. Un cuerpo formado por muchos cuerpos, que reconoce, en su vulnerabilidad, la potencia y la posibilidad de otorgarnos autoridad, como una multitud de voces que generan confianza dentro de una comunidad.
La Multitud-Godzilla, es la agregación de críticas, voluntades y singularidades que caracteriza nuestra condición vulnerable en tanto que todos y todas necesitamos ser cuidadas. Una giganta que avanza con la convicción esencial
de que hay que radicalizar los cuidados; ponerlos en el centro de las vidas que han de ser vividas en común; colectivizarlos como respuesta ante las distintas fuerzas que tienden a pensarnos como individuos aislados. Un monstruo que debemos liberar y encarnar, conscientes de que todo se puede perder y nacer de nuevo.
Residencias, códigos fuentes, sotanos, rupturas y niñas bonitas
El programa de esta edición de ZEMOS98 está atravesado por las Residencias CopyLove -fruto de la colaboración con ColaBoraBora y Ley Seca-, que un año más vuelven a ocupar las mañanas del Festival, para profundizar sobre la idea de CopyLove y los procomunes invisibles. sobre la vida en común y la redefinición de la riqueza, sobre qué significa y cuales son las condiciones para una vida que merezca la pena ser vivida o sobre la diversidad de monstruos que son cada una de las comunidades a las que pertenecemos. Largas y acogedoras conversaciones, además de otras metodologías que ayuden a pensar y practicar colectivamente, que se compartirán con la cooperativa ETCS (Estrategias de Transformación Comunitaria Sostenible) el centro social Ateneu Candela de Terrassa o la filósofa Marina Garcés.
La idea de lo común, los colectivos y prácticas invisibilizadas también protagonizan los Códigos Fuente Audiovisuales, que vuelven a estar presentes en el evento el jueves y viernes. Además, el miércoles Marisol: una conferencia escénica, sobre dos personas, una noche de verano en un sótano mal ventilado y una bolsa de poliéster dentro de la que palpita la identidad sin vida de una actriz muy bajita; el viernes, Dj Rupture invadirá el Teatro Alameda con sus dinámicos sets que mezclan distintos mundos: y el sábado tendrá lugar La Niña Bonita, una fiesta al aire libre en La Carpa (espacio artístico), con la colaboración de Ecos del gueto. que servirá para clausurar esta edición a la vez que celebrar los 15 años del Festival: comida a precios populares y sesiones musicales con ritmos del Sur Global, con artistas como Mata Hari, Cardopusher, Caballito, Orxata, Soniye o Ion din Anina.
Todo esto (y seguro que mucho más) prometen Los Vulnerables. Si puedes vivirlo en persona, no desperdicies la oportunidad de formar parte de ese monstruo de carne. Y si no puedes ir a Sevilla, forma parte de la ardorosa multitud virtual siguiendo la actividad con los hashtag #LosVulnerables y #15ZEMOS98
Imaginad una multitud girando alrededor de un fuego invisible, imaginad una multitud invisible atravesando un fuego visible. Imaginad a una multitud, que pese a haber sido mutilada, camina, habla, grita, retrocede, se oculta y es ocultada. Imaginad a una multitud que arde en el combate de la vida. Dicen que entonces los vieron por primera vez y que tras ellos se erigía un escudo que los hacía invencibles. Eran: Los Vulnerables.
De esta forma se presenta la 15ª edición del Festival ZEMOS98: Los Vulnerables, que se celebra durante toda esta semana, del 8 al 13 de abril, entre el Centro de las Artes de Sevilla y algunos otros espacios de la ciudad.