Acuerdo para eliminar tráfico en la carretera de Massarrojos que impide salir de casa a una discapacitada

El calvario de Lali Romero, vecina discapacitada de Massarrojos (València) ya tiene fecha de caducidad. Como denunció en eldiariocv.es, la cerretera que la cruza la pedanía le impide moverse con plena autonomía debido a que su silla de ruedas no cabe por las estrechas aceras de esta carretera por la que cada día pasan más de 9.000 vehículos.

El concejal de Desarrollo Urbano y Vivienda, Vicent Sarrià, acompañado por el diputado provincial de Carreteras e Infraestructuras, Pablo Seguí, se ha reunido este miércoles con el alcalde de Massarrojos, Carles Verdeguer, y los representantes vecinales de esta población de la ciudad de València, para informarles del acuerdo que va a permitir que el tráfico se desvíe en el plazo de dos años gracias a una intervención conjunta de la Diputación y los ayuntamientos afectados.

Sarrià ha expresado su satisfacción “por lo que entiendo que es un buen acuerdo con la Diputación de València y el resto de municipios afectados, que va a permitir sacar fuera del pueblo una travesía que soporta a diario un tráfico que ronda los 9.000 vehículos y que genera un problema que afecta a la calidad de vida de los vecinos de Massarrojos, especialmente de los que viven en la propia travesía”.

Al finalizar esta reunión, en la que han participado también el alcalde de Rocafort, Víctor Giménez, la alcaldesa de Moncada, Amparo Orts, y representantes de la Generalitat y del Ayuntamiento de Godella, Vicent Sarrià ha recordado que “incomprensiblemente, en los últimos 20 años las administraciones anteriores han sido incapaces de resolver este problema que afecta a varios municipios”.

Sarrià ha agradecido a la Diputación de València, “y especialmente al diputado de Carreteras, Pablo Seguí, que se hayan implicado en alcanzar una solución que es buena para todos”.

Por un lado, “la Diputación invertirá alrededor de dos millones de euros en la ejecución de un desvío por el barranco de Palmaret, que enlazará con el camino de Camarena, en Moncada, y que supondrá al final de su ejecución que esos 9.000 vehículos diarios no pasen por dentro del casco urbano de Massarrojos”.

“Los ayuntamientos de València y Moncada se comprometen a facilitar, en la medida de nuestras posibilidades, la ejecución de esa importante obra, expropiando los terrenos necesarios para acometerla”, ha añadido Sarrià.

Por su parte, la Diputación, en el plazo de dos años que se calcula que tardará en concluirse el nuevo trazado, “actuará en la travesía para ampliar aceras, regular mejor semafóricamente el tránsito y con otras medidas que mejoren la calidad de vida de los 2.500 vecinos de Massarojos”.

El concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, ha insistido en que “es un acuerdo muy positivo que, en definitiva, demuestra que cuando hay colaboración entre administraciones se logra solucionar los problemas de las personas”.