Las algas no son basura
“Las algas no son basura y cumplen una importante función medioambiental en las playas” es el mensaje que quiere hacer llegar la Diputación de Valencia a los ciudadanos y ayuntamientos en busca de unas playas sostenibles. Para ello, la corporación provincial ha lanzado una campaña de sensibilización que incluye recomendaciones a los ayuntamientos sobre cómo actuar ante la llegada de arribazones a las costas.
“Del mismo modo que sabemos que los árboles caducos pierden las hojas en otoño, es importante que conozcamos sus funciones y el porqué de su llegada masiva a nuestras playas en determinados momentos”, explica Josep Bort, diputado de Medio Ambiente. La corporación quiere hacer ver a los ciudadanos que las algas son un indicador de la calidad de las aguas y evitar el rechazo a las mismas.
La Diputación ha puesto en marcha la campaña con el objetivo de promover la protección y la lucha contra el cambio climático, mediante comportamientos diarios más sostenibles. “Pretendemos hacer pedagogía sobre los valores ambientales de nuestras playas, así como de su correcto uso, gestión y mantenimiento”, señalan desde el Área de Medio Ambiente, impulsora de la campaña.
En el marco de esta campaña, se han llevado a cabo experimentos y talleres didácticos que muestran muchos aspectos relacionados con el cambio climático y cómo afecta este al ciclo del agua y al ecosistema litoral. Como elemento dinamizador del resto de actividades, se ha instalado un termómetro gigante que recordará que la temperatura del planeta va en aumento. Los asistentes también pueden calcular su huella de carbono, tocar el caparazón de una tortuga y ver cómo es la posidonia oceánica en planta, tal cual está a la mar, y, tienen la oportunidad de valorar todo el que esta nos aporta y qué tiene que ser la gestión correcta de sus restos.
Desde el área de Medio Ambiente explican que cuando se produce una llegada masiva de algas a la orilla el procedimiento que se debe seguir es esperar entre dos y tres días para comprobar si las propias mareas las vuelven a transportar al mar. En caso de que esto no sucediera, se debe actuar en función del tipo de playa. En el caso de cantos y gravas se realizaría una limpieza manual, mientras que en las zonas de arena se realizaría una limpieza mecánica limitada a la zona seca. La extracción se realizaría dejando un colchón de diez centímetros de algas sobre la arena.