La respuesta no tardó en llegar. Con la decisión este jueves por parte de la Audiencia de Navarra de dejar en libertad provisional bajo fianza de 6.000 euros a los cinco miembros de La Manada, llegó de nuevo el movimiento feminista que inundó el mismo jueves por la tarde y el viernes las calles de todo el país como señal de protesta.
Protesta que se preparó en la localidad alicantina de San Vicente del Raspeig para la tarde del viernes en la plaza de España de la localidad. Una de las integrantes de la Plataforma por la Igualdad Raspeig (PIR) se encargó de comunicar a subdelegación del gobierno el jueves por la tarde dicha intención basándose en “el carácter extraordinario y de urgencia” que contempla la ley.
Sin embargo, la subdelegación del gobierno respondió al día siguiente al mediodía que había recibido escrito de comunicación “con fecha de entrada” ese mismo día y que finalmente no podía permitir la concentración a la que se estimaba iban a acudir unas cien personas. El motivo, según el escrito: “Se ha comunicado fuera de plazo, pues aún tratándose del trámite de urgencia por causas extraordinarias y graves que justifiquen la urgencia, la comunicación no cumple la antelación mínima de 24 horas”.
El documento, firmado por el subdelegado José Miguel Saval, perteneciente al Partido Popular, no impidió a la plataforma feminista presentarse en la plaza de España. Sabiendo que les habían denegado el permiso para concentrase, acudieron sin chapas, camisetas o carteles reivindicativos. “Algunas se fueron y otras decidimos ir a título individual”, explica una de las integrantes a eldiario.es.
Según esta fuente, la Guardia Civil acudió al recinto para fotografiar a la gente y disolver el acto “de malas maneras” cuando, espontáneamente, la gente empezó a hacer un círculo cogiéndose de las manos mientras coreaban “ninguna agresión, sin respuesta”. Más tarde, añade, un agente les dijo que “estaba prohibido hablar del tema de La Manada”.
La persona convocante del acto asegura que posteriormente recibió una llamada de la guardia civil para informarle de que le estaban tramitando una denuncia como representante de la asociación.
Se da la circunstancia, recuerdan desde la asociación, que uno de los integrantes de La Manada perteneció al cuerpo de la Guardia Civil. Asimismo, como también han expuesto en un escrito publicado en su página de Facebook, “en todos los municipios valencianos las comunicaciones no llegaron a tiempo, dada la urgencia, pero todas las concentraciones y manifestaciones transcurrieron sin problema, pero en San Vicente no”.
Subdelegado
La semana pasada el gobierno de Pedro Sánchez nombró los delegados de gobierno de las distintas comunidades autónomas. A la región valenciana fue a parar Juan Carlos Fulgencio, secretario general del PSPV-PSOE en la comarca de l'Horta Nord. En los próximos días le corresponde a Fulgencio elegir, entre quién será la persona que sustituya a José Miguel Saval como subdelegado en Alicante.
Saval, profesor de la Universidad de Alicante, entró en las quinielas para ser el próximo alcaldable del PP en la capital de provincia auspiciado por José Císcar, líder del PP provincial. Sin embargo, la inesperada llegada al poder de su compañero de filas Luís Barcala gracias al voto en blanco de la tránsfuga Nerea Belmonte le sitúa como más que probable número uno de la lista para las municipales de 2019 y a Saval fuera de la política.