La población de casi la mitad de los vertebrados de la península ibérica está declive. Así lo plasma un estudio liderado por investigadores de la Universidad de Alicante (UA) y de la Universidad de Barcelona (UB), publicado en la revista científica Biological Conservation, que de las más de 1.500 poblaciones y 400 especies analizadas, los datos revelan que los grupos con mayores tasas de declive son los anfibios y los peces, y los sistemas más amenazados son los sistemas acuáticos de agua dulce.
La pérdida de biodiversidad es una de las principales amenazas que existen a nivel global. En este sentido, señala Roberto Rodríguez-Caro, investigador María Zambrano del Departamento de Ecología la UA, “las tasas de extinción son muy altas y se prevé que sigan aumentando si no se aplican medidas de conservación que mitiguen sus amenazas”. Uno de los indicadores previos a la extinción es la reducción del tamaño de la población, es decir, la disminución del número de ejemplares en libertad. Por ello, añade el investigador de la UA, “evaluar si las poblaciones están estables, en aumento o en declive es clave para poder identificar los problemas y buscar soluciones”.
Gracias a este estudio liderado por Roberto Rodríguez-Caro de la UA y por Pol Capdevila, investigador de la UB, se ha creado la base de datos de tendencias poblacionales de la península ibérica más grande. “Datos previos indicaban unas tendencias positivas en esta región, pero con este proyecto se ha podido triplicar la información y se ha corroborado que los resultados no son tan positivos”, señalan los investigadores.
Los grupos como los anfibios y los peces continentales son los que mayores tasas de declive han presentado, por lo que son necesarias mejoras en los hábitats y en la mitigación de amenazas para su preservación en el futuro. Sin embargo, no todos los resultados indican tendencias negativas. La fauna, mamíferos y aves son los grupos que presentan resultados más optimistas, siendo generalmente las especies que mayor inversión tienen para su conservación.
En total, este trabajo ha contado con un grupo de 21 científicos de distintos centros de investigación que han estado trabajando desde el 2021 para recopilar la información de poblaciones de vertebrados de la península ibérica de los últimos años. Dentro del equipo también están investigadores de la UA como Aitor Forcada, Iván Sola y Carlos Valle.
Aunque estamos ante la mayor base de datos recopilada hasta la fecha, explica Rodríguez-Caro, “sigue habiendo vacíos de información en determinadas regiones de la península ibérica y con determinados grupos taxonómicos como los reptiles. La investigación de estos grupos sería necesaria para poder hacer un diagnóstico más preciso de la biodiversidad ibérica”.
Los resultados del estudio, financiado por la Sociedad Ibérica de Ecología (SIBECOL), sugieren que “estamos ante un escenario de pérdida de biodiversidad en el que revertir sus principales amenazas es clave para la conservación de especies”, advierte el investigador de la UA. La creación de esta base de datos es un gran paso para a priorizar los esfuerzos de conservación con el fin de mantener altos niveles de biodiversidad frente a las amenazas actuales y futuras.