Avanzar sin titubeos

Mientras Pedro Sánchez titubea sobre conformar un gobierno de derechas de la mano de Ciudadanos o un gobierno de progreso de la mano de Unidas Podemos (o una tercera opción de gobernar en solitario con un ejecutivo débil), la sociedad no puede paralizarse. El siguiente paso son las elecciones del 26 de mayo en las que decidiremos qué gobiernos locales queremos y cómo será el próximo Europarlamento donde, por cierto, PP y PSOE votan lo mismo el 75% de las veces.

Si el 28 de abril ya salimos a votar con toda nuestra ilusión y fuerza para parar a la extrema derecha y con la esperanza de tener un gobierno que nos permitiera avanzar en derechos, el 26 de mayo no puede ser menos. Ese día tomaremos una decisión muy importante sobre cómo será la calidad de nuestras vidas, porque nuestro día a día está absolutamente condicionado por las políticas que se hacen, o no se hacen, desde los consistorios. Si pones un pie en la calle y lo primero que piensas es que está muy sucia, si no usas el transporte público urbano porque es caro y de mala calidad o si al volver a casa sola de noche tienes miedo de pasar por ciertas zonas porque están poco iluminadas, estás sufriendo problemas que dependen de tu ayuntamiento.

No diré que esto sólo se cambia votando, porque sería faltar a la verdad. Las asociaciones de vecinos y vecinas y otros colectivos son imprescindibles para empujar los cambios que las ciudades necesitan. El trabajo de la sociedad civil organizada se ha demostrado, en infinidad de ocasiones, como imprescindible para mantener y profundizar en calidad democrática. Sin embargo, las cuestiones que nos afectan cada día, también se cambian votando. Optando por partidos que verdaderamente estén interesados en los problemas cotidianos que afronta la ciudadanía, que entiendan el municipalismo como una vía fundamental para hacer barrios mejores, habitables pero también acogedores. Ciudades y pueblos en los que las personas podamos ser plenas y felices.

El 26 de mayo volvemos a decidir si avanzamos o retrocedemos. Si elegimos gobiernos que apuesten por la privatización de los servicios y los pelotazos urbanísticos o por gobiernos que apuesten por ampliar la calidad de los servicios públicos y políticas con perspectiva medioambiental y feminista. Por primera vez en las elecciones municipales, Podemos se presenta en decenas de ciudades del País Valencià, con gente al frente que ha estado años preparándose para este momento, la hora de impulsar las políticas que nuestros municipios necesitan para ser lugares de prosperidad. Con Podemos en el gobierno central, en el gobierno autonómico y los gobiernos municipales, el progreso es imparable. En muchos lugares tendremos que empezar o completar un proceso de sanación necesario después de gobiernos nocivos que han priorizado los intereses individuales frente a los intereses colectivos, pero estamos dispuestas a hacerlo y convencidas de que la política se puede hacer de otra forma.

En el municipio de Sagunto, mi municipio, ya obtuvimos excelentes resultados en las elecciones de abril, con un 22% en las Generales. Esto demuestra que somos una ciudad, abierta, tolerante y que quiere mirar hacia adelante. Hoy, la profundización del cambio es más posible que nunca, con Podemos por primera vez presentándose a las municipales y con un programa valiente y social que apuesta por cuestiones fundamentales para nuestra ciudad. El PSOE determinó que el agua tenía que ser un negocio y nosotras llegamos para decir que no, que el agua es un bien público y por eso queremos revertir su privatización. El PP determinó que unos pocos se podían lucrar a costa el contribuyente y por eso hoy en día tienen varios imputados en el caso Flotador. Abramos ventanas y levantemos las alfombras de la casa consistorial. Esto ya nadie lo para.

*Ainhoa Alberola Lorente, graduada en Publicidad y Relaciones Públicas y en Periodismo. Candidata de Podemos al Ayuntamiento de Sagunto