El Ayuntamiento de Castelló, gobernado por PSPV-PSOE, Podem y Compromís, abre un “nuevo escenario de gobernabilidad municipal” tras la aprobación de una moción presentada por el PP y Ciudadanos con los votos de los valencianistas. La decisión de Compromís, según la concejal socialista Pilar Escuder, supone “un antes y un después” para el Acord de Fadrell, firmado por las tres fuerzas progresistas.
Las grietas que se abren en el pacto de las tres fuerzas políticas de la izquierda tienen como trasfondo la gestión de las fiestas de la Magdalena de Castelló que en tres meses celebran su 75 aniversario. La moción aprobada acuerda que se inste a la Asamblea General de Fiestas a votar la renovación de la Junta de Fiestas y dotarla de más autonomía “según lo acordado en las conclusiones por el IV Congreso Magdalenero y que se recoge en el punto 203 del Arcord de Fadrell”.
La Junta de Fiestas es un órgano de colaboración del Patronato Municipal compuesta por 12 miembros de los colectivos festeros (gaiatas y collas, entre otros) que elaboran estudios e informes y formulan propuestas sobre el presupuesto y el programa de la Magdalena que luego aprueba el Consejo Rector. El Patronato Municipal de Fiestas, que preside la concejal Pilar Escuder, aprobó el pasado 21 de noviembre declarar concluido el mandato de la Junta y suspender su renovación así como iniciar el proceso de constitución de un órgano participativo de coordinación que, bajo la dirección de la Presidencia, colabore en la organización de las Fiestas de la Magdalena 2020, que conmemoran el 75 aniversario.
La moción aprobada señala que la decisión finiquita “más de 30 años de autonomía de la fiesta” y rompe “la esencia del IV Congrés Magdalener”. El texto señala que la Comisión creada para la organización del 75 aniversario de la Magdalena “no es incompatible, sino totalmente complementaria, con las funciones y la labor de la Junta de Fiestas”.
Los grupos municipales de PSPV-PSOE y de Podem-Esquerra Unida han llevado al pleno una enmienda a la totalidad que defiende “el derecho de la administración a organizar, por su propia voluntad unilateral, los servicios a su cargo en la forma que estime más conveniente a los intereses públicos”. Los tres votos en contra de la enmienda de los concejales de Compromís han posibilitado que se aprobara la moción.
La concejal de Compromís Verònica Ruiz ha expuesto en el pleno que la postura de la formación valencianista “ha sido siempre la misma”. “No nos oponemos a la creación de un grupo de trabajo específico del 75 aniversario pero no podía ser en detrimento de la Junta de Fiestas”, señala Ruiz quien aboga por “cumplir la normativa vigente y el Acuerdo de Fadrell”.
El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Castelló, Alejandro Marín Buch, ha pedido al equipo de gobierno que “rectifiquen, entonen el mea culpa y enmienden sus errores”. La portavoz popular, Begoña Carrasco, tilda la decisión de no renovar la Junta de Fiestas de “absolutamente arbitraria y premeditada” y advierte que “ha generado conmoción en todos los estamentos de la fiesta”. Ambos concejales han agradecido a Compromís “su coherencia” desmarcándose de sus socios de gobierno municipal.
Carrasco ha acusado al PSPV y a Podem de tratar de “aplastar por completo” la moción con la enmienda presentada. La portavoz popular sostiene que se ha producido un “golpe de Estado a la Junta y a las fiestas de nuestra ciudad”. Luciano Ferrer, el único concejal de Vox en el consistorio, ha criticado que la enmienda presentada supone “una dejación de funciones”.
El portavoz del grupo Podem-Esquerra Unida, Fernando Navarro, ha reconocido que es “un debate muy duro y complejo” y que todos los grupos municipales “hemos contribuido a crisparlo”. Navarro ha acusado al PP de no preocuparse por “el debate de fondo sobre cómo debe funcionar el mundo de la fiesta” y ha pedido a Compromís su abstención en el voto de la enmienda (lo que hubiera deshecho la moción y finalmente no se ha producido) para “mantener el Acuerdo de Fadrell”. El concejal de Podem considera que la oposición “ha encontrado una fisura en el Acuerdo de Fadrell y apuesta por mejorar la coordinación entre los socios que gobiernan el consistorio y la ”gestión de la pluralidad interna“.
La concejala de fiestas, Pilar Escuder, ha recordado que el patronato que preside tiene personalidad jurídica propia y ha acusado a la oposición de trabajar “sólo para hundir este gobierno”. “Sólo buscan lo peor para Castelló”, añade. Escuder ha denunciado que desde la suspensión de la Junta el pasado 21 de noviembre, ha recibido “ataques lamentables” como insultos y “vejaciones en las redes sociales de personas que discrepan de mi actividad política”. “Lamentablemente no he encontrado el amparo de algunos compañeros y grupos municipales”, apostilla la edil. La moción aprobada con los votos de Compromís, arguyen fuentes municipales socialistas, “no tiene efecto jurídico alguno”.