“Una serie de hitos que se consideran de interés”. Así detalla la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil la cronología previa a las elecciones autonómicas y municipales de 2007, en el marco de una campaña electoral de los socialistas valencianos pagada en B mediante empresas pantalla por la trama del 'caso Azud'. Aquellas elecciones, en las que el PP liderado por Francisco Camps y Rita Barberá barrió a los socialistas valencianos, se celebraron el domingo 27 de mayo de 2007.
La semana previa a unas elecciones, en cualquier formación política, supone un constante ajetreo de militantes y cuadros orgánicos a medida que se acerca el momento de ir a votar a las urnas. Casi nadie tiene tiempo para nada ya que la agenda de candidatos, actos electorales o entrevistas con medios de comunicación es constante. Sin embargo, algunos cargos socialistas, investigados en el 'caso Azud', hicieron un hueco en su agenda para reunirse con el empresario Jaime Febrer, considerado como el presunto corruptor de la trama.
A veces una simple cronología resulta más reveladora que los meros indicios. Aquella semana empezó el lunes 21 de mayo a las 9.30, con una reunión en la sede de la empresa de Febrer mantenida con Rafael Rubio, en aquel entonces concejal socialista en el Ayuntamiento de Valencia, y con José Luis Vera, un abogado históricamente vinculado con el PSPV-PSOE.
El viernes, día previo a la jornada de reflexión, la agenda del empresario Jaime Febrer revela varios encuentros con políticos, tanto del PP como del PSPV. La jornada se inicia con una reunión, a las 11 de la mañana, entre Febrer y Vera. A las 13h, el empresario se encuentra con el 'popular' Alfonso Grau, entonces número dos de Rita Barberá y también investigado en la causa por haberse embolsado dos millones de euros de la trama.
La reunión, de apenas media hora, precedió a otro encuentro del atareado empresario, esta vez con un dirigente del partido de la oposición, el responsable de Finanzas de los socialistas valencianos José María Cataluña.
La UCO vincula estas reuniones con los movimientos de fondos en cuentas bancarias de una de las empresas pantalla que abonaban gastos electorales del PSPV-PSOE. Así, entre el 22 de mayo y el 15 de agosto de 2007, la empresa Gigante Edificaciones recibe 1,3 millones de euros de Espacios Urbanos de Jijona, una firma creada por Jaime Febrer para un proyecto urbanístico en la localidad alicantina en el marco del cual la entonces alcaldesa del PP se llevó medio millón de euros.
Esos fondos se reparten por tres vías: 548.483 euros salen en efectivo por una sucursal de Bancaja en Alicante; 484.480 euros de destinan a pagar a empresas vinculadas a la publicidad (las que elaboran el material electoral de los socialistas) y 261.000 euros van a parar a la empresa del letrado José Luis Vera. Los investigadores de la Guardia Civil vinculan estos pagos “con el PSOE”, concretamente con “servicios contratados en lo comúnmente denominado como B, es decir al margen de la facturación [en A]”.