Ciudadanos y el PP compiten en sus críticas a la política de Marzá

El conseller de Educación, Vicent Marzà, se ha convertido en el enemigo público número uno del PP y Ciudadanos. Intentando capitalizar las críticas de los padres católicos y las escuelas concertadas, ambas formaciones cargan continuamente contra la política educativa del dirigente de Compromís, bien sea por el decreto de plurilingüismo, bien por las renovaciones de las unidades concertadas en los colegios.

Las dos formaciones ha calificado al Consell de sectáreo, de imponer su ideología, de chantajista, de vulnerar los derechos de los padres, derrocar las libertades de padres y alumnos.... y una larga lista de términos nada decorosos durante sus enfrentamientos parlamentarios.

Desde que la Diputación de Alicante y el PP presentaran sendos recursos contra la implantación del modelo plurilingüe, la guerra ha subido de tono. Tras la decisión del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) de mantener la suspensión cautelar del decreto, los populares exigen continuamente explicaciones al conseller y han propagado la estrategia del miedo por los centros, especialmente hacia los profesores, insinuando que Educación da órdenes ilegales.

Este jueves, la líder del partido, Isabel Bonig, aprovechando la visita de Rafael Hernando, portavoz en el Congreso, ha amenazado con acudir a los tribunales y emprender medidas penales contra Marzà si no paraliza la medida, según el diario Levante-EMV. La popular también exige la comparecencia del president de la Generalitat, Ximo Puig, por los mismos motivos.

El grupo Ciudadanos no quiere que el PP le adelante por la derecha en esta cuestión, así que se ha puesto manos a la obra. La diputada responsable de Educación, Mercedes Ventura, ha pedido la convocatoria de la Diputación Permanente de las Corts para que Marzà dé explicaciones sobre la aplicación del “decretazo”.

La formación naranja insiste en que el decreto es “discriminatorio” y la actitud del conseller les parece cobarde. “Es muy cobarde no dar unas instrucciones claras sobre qué proyecto hay que aplicar”, ha subrayado Ventura, quien ha explicado que “los directores están llamando a inspección porque no saben qué tienen qué hacer”. En esta línea, ha preguntado si el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, “está ya de vacaciones” y le ha instado a “pararle los pies a Marzà ante el caos que está produciendo en la educación valenciana”.

El conseller de Eduación ya compareció hace dos semanas en las Corts para explicar el modelo plurilingüe y aseguró que no iba a tolerar “que se meta miedo en el cuerpo a los directores y profesores”, en referencia a las acusaciones del PP y Ciudadanos. Marzà explicó entonces a los diputados que su departamento ha pedido un informe a la Abogacía de la Generalitat para que determinara qué había que hacer a partir de ahora. La respuesta fue que, de momento, los colegios no tendrían que hacer ningún cambio.