Al colegio con casco
El bocadillo, la mochila y....el casco. Varios alumnos del Colegio Público Cervantes, en el centro de Valencia, han acudido a clase protegidos como medida reivindicativa -y hasta de seguridad- después de que la Generalitat no haya reparado el aula de infantil donde hubo desprendimientos antes de las vacaciones de Pascua.
Concretamente, el pasado día 15 cayeron varias trozos de una protección de escayola en una clase de niños de cuatro años. No se produjeron daños personales, pero la Conselleria de Educación, según los padres, se comprometió a reformar varias aulas con problemas estructurales, concretamente, las de ciclo infantil.
Dos semanas después, y pasadas las vacaciones de Semana Santa y el lunes festivo de Sant Vicent, las condiciones siguen siendo las mismas. Ni se ha instalado la prometida malla de seguridad en el techo ni se han cambiado los falsos techos. Así, algunos padres han optado por llevar a sus hijos con casco a clase.
La Generalitat, por su parte, anuncia una pronta solución y niega que se comprometiera a reparar las aulas durante las vacaciones. El presupuesto de la reforma supera los 50.000 euros y, como marca la ley, debe licitarse mediante un concurso público.
Hoy mismo “se adjudicará la obra y la empresa ganadora tendrá dos días para presentar un plan de trabajo y seguridad, con lo que la reparación podría comenzar el viernes o la próxima semana», han dicho desde Educación al diario Levante-EMV.
Según el AMPA, en el Cervantes hay 190 niños de entre 3 y 5 años distribuidos en 8 aulas. Cuatro de esas clases estarían afectadas por los mismos defectos constructivos que la que sufrió los desprendimientos.