De candidato a presidir el PP nacional a alcalde de la Font de la Figuera por el desacuerdo entre PSPV y Compromís

Elio Cabanes es desde el pasado sábado el nuevo alcalde de la Font de la Figuera por el PP. Cabanes alcanza así la vara de mando de un municipio de poco más de 2.000 habitantes cinco años después de haber aspirado a ser presidente del PP nacional tras la marcha de Mariano Rajoy.

La de Cabanes fue una candidatura sorpresa y muy minoritaria (contó con 140 avales, 40 más de los mínimos requeridos) enarbolando la bandera de la candidatura “del militante de base”. Esto le valió para estar unos días en primera fila informativa y para llegar al final a estrechar la mano a Pablo Casado en una especie de “pacto por la unidad” que llevaría a este a encabezar el partido desde la calle Génova de Madrid.

Este sábado Cabanes recuperaba la alcaldía para el PP que había perdido en 2011, y que desde entonces encadenó gobiernos del PSPV y de Compromís. Y lo hará con un gobierno en minoría precisamente por la falta de acuerdo de las formaciones de izquierdas que no han cumplido el pacto del Botànic, donde se establecía que en aquellos ayuntamientos donde la izquierda sumara mayoría (y aquí lo hacía con 4 ediles del PSPV y 2 de Compromís) se debía pactar un gobierno progresista.

No obstante, no hubo tal acuerdo y Elio Cabanes, en tanto que candidato de la lista con más voto popular, fue investido alcalde de la Font de la Figuera por el PP.

La formación local de Compromís se ha quejado: “La única propuesta que hemos tenido por parte del PSPV ha sido que hiciéramos alcaldesa a Ibana a cambio de quedarse Compromís en la oposición con concejalías”. Los valencianistas que la propuesta esta “alejada de la realidad de las urnas” y reclaman pactar un gobierno de coalición que dé concejalías a todos los partidos del ayuntamiento. Desde la formación naranja insisten en lo que han manifestado al PSPV: “Estamos dispuestos a retomar las negociaciones para configurar un gobierno progresista cuando haya predisposición y respeto”.

Pero por lo que hace a los socialistas, en un escrito en redes sociales, han felicitado al nuevo alcalde y han señalado el trabajo y la necesidad de acuerdos que habrá en esta legislatura, pero sin hacer ni una mínima referencia a un posible acuerdo con Compromís que pueda cristalizar en una moción de censura que cambie la alcaldía.

Tampoco Quatretonda

En Quatretonda se dio la misma circunstancia. Compromís y el PSPV no llegaron a un acuerdo y esto dejó la alcaldía en manos de la lista más votada. Según la candidata de Compromís -que cuenta con 4 concejales- el principal motivo de la falta de acuerdo es la alcaldía. Los valencianistas proponían un reparto de dos años y medio para ellos y el año y medio final para los socialistas, pero aseguran que el PSPV quería los cuatro años para ellos pese a tener menos concejales (consiguieron 3).

Desde el PSPV han justificado esta situación manifestando: “Las decisiones en nuestro partido se toman en asamblea”. Esta asamblea se pronunció en función de cómo han ido los pactos en los últimos mandatos.

En principio esta situación, según el Pacte del Botànic, debería resolverse apoyando la lista con menos concejales a la que tiene más sin necesidad de reparto de la alcaldía. Pese a ello, al final el PSPV votó a su candidata, lo mismo que hizo cada formación, posibilitando la alcaldía del PP.