Investigadores de la UPV recuperan la ancestral 'safanòria morà' de Villena

Un equipo de la Universitat Politècnica de València (UPV), perteneciente al Instituto de Conservación y Mejora de la Agrodiversidad Valenciana (COMAV), ha recuperado, mejorado y tipificado la zanahoria morada de Villena (Safanòria morà), un cultivo histórico del sur de València y norte de Alicante -desde Ontinyent hasta Villena- que estaba en vías de desaparición.

Con la colaboración de numerosos agricultores de la zona, el impulso de la empresa Agrícola Villena -principal productora y comercializadora de zanahoria de España- y un grupo de consumidores locales, el equipo del COMAV de la UPV ha evaluado en producción ecológica decenas de variedades ancestrales y del banco de semillas del COMAV, así como otras variedades comerciales.

Y tras cinco años de actividades de evaluación y selección en campos de ensayos agroecológicos, evaluación de raíces, analíticas y catas con paneles entrenados y consumidores, ha seleccionado y obtenido una variedad que destaca por su alto rendimiento para producción ecológica y convencional, así como por la gran calidad de la raíz.

“Este nuevo ecotipo mejorado ya lo están explotando los agricultores de Villena. Adaptado a producción sostenible, presenta una alta calidad organoléptica y nutricional, y está siendo muy bien aceptada por los consumidores”, explica Adrián Rodríguez Burruezo, investigador del Instituto COMAV de la UP y coordinador del proyecto.

Entre sus características, es más cilíndrica que otras zanahorias moradas, su tamaño es menor -similar las zanahorias naranjas habituales en el mercado-. Además, presenta una llamativa combinación de colores, blanco en el núcleo y morada en el resto.

Y, a diferencia de las zanahorias naranjas, en general, la morada es mucho más jugosa, crujiente y dulce (5-7 g/100 g de azúcares) y aporta un contenido extraordinario en antocianinas del tipo cianidinas. Y es apta fundamentalmente para consumo en fresco, pero también en salmuera, frita en chips o en pastelería. En los próximos meses, el equipo del Instituto COMAV de la Universitat Politècnica de València iniciará el proceso de registro varietal para proteger legalmente esta variedad e impulsar la marca de calidad correspondiente.