Las cuentas del Partido Popular en la Diputación de Alicante son un misterio que inquieta cada vez más a la oposición. Y, más concretamente, la cuenta de la CAM con la numeración 2090 3025 56 0200086039, que custodiaba la asignación de la Diputación al PP hasta que, al dimitir José Joaquín Ripoll como presidente, fue vaciada mediante la emisión de dos cheques y cerrada pocos días después, según la documentación a la que ha tenido acceso elDiario.es
El portavoz de Compromís en la institución provincial, Gerard Fullana, ha denunciado que no hay rastro de la contabilidad del PP entre 2007 y 2015, el periodo que comprende la última legislatura de José Joaquín Ripoll y Carlos Mazón, como presidente y vicepresidente de la institución respectivamente. “Durante esos años el grupo del PP manejó sin acreditación alguna más de 400.000 euros”, afirma Fullana.
El grupo popular de la Diputación de Alicante, tal como ha informado este diario, vació su cuenta bancaria al dimitir José Joaquín Ripoll de presidente, acosado por los casos de presunta corrupción. El PP expidió dos cheques por un valor total de 64.980 euros, prácticamente todo el saldo que la formación tenía en una cuenta bancaria de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM).
El primer cheque (con la numeración 4200 5608970), por importe de 48.429,36 euros, se ingresó en la oficina principal de Bankinter en Alicante. El segundo cheque (con el número correlativo al anterior 4200 5608971), por importe de 16.550,64 euros, se ingresó en la oficina del BBVA de empresas en la rambla de Méndez Núñez, según se desprende de la documentación en poder de esta redacción.
Fullana ha anunciado este lunes que se plantea denunciar estos hechos ante la Fiscalía Anticorrupción para intentar dilucidar el incierto destino del dinero público. El diputado de la formación valencianista solicitó los expedientes de contabilidad de los grupos políticos representados en la Corporación provincial y, al no recibir la documentación completa, recurrió al Síndic de Greuges. La respuesta de la Intervención de la Diputación de Alicante confirma, según Fullana, que la contabilidad del PP “no existe”.
La Intervención reconoce en su respuesta a la Sindicatura de Greuges que el control interno de la contabilidad de las dotaciones económicas asignadas a los grupos políticos “se ha realizado en el ejercicio de la función interventora como fiscalización limitada previa, no procediendo realizar el control financiero de forma planificada y sí un control posterior cuando una norma específica lo solicite”. El informe asegura que el Pleno de la Diputación, órgano competente para pedir la contabilidad de los grupos políticos, “no la ha solicitado durante el periodo comprendido entre los años 2007 al 2014, ambos inclusive”.
Compromís también denunció ante el Tribunal de Cuentas que la formación desvió cerca de medio millón de euros entre 2015 y 2018 de la subvención de la Diputación al partido. Gran parte de los fondos fueron a parar a una cuenta del PP en Murcia. El tribunal que vela por las cuentas públicas remitió los hechos a la Fiscalía para que determine si “la acción pública debe ser admitida o archivada” y, recientemente, ha tumbado las alegaciones de los populares.
“La respuesta de la Intervención confirma la opacidad y descontrol que ha existido en el citado periodo en el que la Diputación de Alicante vivió sumida bajo el escándalo del caso Brugal y recobra importancia tras la publicación en elDiario.es de una información que constata que José Joaquín Ripoll se despidió de la institución vaciando las cuentas del grupo popular con la expedición de dos cheques por valor de 64.980 euros”, denuncia Fullana.
Los socialistas instan a Ciudadanos a presionar a Mazón
El portavoz del grupo socialista en la Diputación de Alicante, Toni Francés, también ha pedido al presidente de la institución provincial, Carlos Mazón, que explique dónde han ido a parar los 450.000 euros que el PP manejó entre 2015 y 2018. Para el grupo socialista, “es evidente” que sobre las cuentas del PP en la Diputación “siempre ha sobrevolado la sombra de la sospecha”.
La publicación de los pantallazos bancarios que muestran cómo se vació la cuenta al dimitir Ripoll, son para Fránces “otro capítulo que el PP debe explicar, una época en la que Mazón aparecía como protegido de propio Ripoll”. El portavoz socialista considera que el PP debería “hacer un ejercicio de transparencia, y Ciudadanos se lo debería de exigir, y no esperar a que al final todos estos temas se tengan que dilucidar a través de los tribunales de justicia u organismos fiscalizadores”.
“Mazón debería de dar un paso adelante, explicar qué es lo que ha pasado, y si algo se ha hecho mal, actuar en consecuencia, no como el caso de la factura impagada de IFA, de un acto del que Mazón era el responsable de la gestión y que sigue envuelto en la sospecha, como todos los que se hicieron desde el PP en aquella época”, apostilla el diputado socialista.
El PP ha reaccionado en un comunicado a los “ataques continuados de Compromís”, que tilda de “cortina de humo para tapar las vergüenzas” de su asesor jurídico, que carece de la compatibilidad preceptiva para poder ejercer como abogado, además de haber ubicado su despacho profesional en la Diputación, según denuncian los populares. La formación conservadora también acusa al PSPV-PSOE de “sumarse al carro de Compromís” para “desviar la atención de su portavoz en la Diputación y alcalde de Alcoy, Toni Francés, que se ha saltado el cierre perimetral de su municipio y que además lo hizo en coche oficial”.