La investigadora Margarita Salas, que falleció el pasado 7 de noviembre, fue un “bastión” y un “referente” para muchas mujeres en la Ciencia, demostró que se puede “llegar a lo más alto” en la carrera científica y significó un “símbolo de la igualdad”.
Así lo han puesto de manifiesto las oncólogas Ana Lluch y María Blasco, el presidente de la Generalidad Valenciana, Ximo Puig, y el ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, en el Consejo Valenciano de Cultura (CVC), donde han participado en una mesa redonda de homenaje póstumo a la bioquímica asturiana.
En una sala abarrotada para homenajear a Margarita Salas y celebrar el día internacional de la mujer y la niña en la Ciencia, el presidente del CVC, Santiago Grisolía, también ha subrayado que la investigadora “intentó poner la ciencia a un nivel digno”.
Por su parte, Ximo Puig ha subrayado que Salas es “una referencia en la igualdad, que en la ciencia está lejos de producirse”, y ha recordado que cada vez hay menos mujeres en las carreras técnicas.
“Estamos ante un reto fundamental. La nueva economía no puede estar construida desde una mirada masculina y, por eso, Margarita Salas ha significado esa ambición y símbolo de la igualdad y de las mujeres científicas”, ha destacado Puig.
Pedro Duque ha resaltado su “gran labor” como investigadora y como “puntera” en la bioquímica, y subrayado que algunas de las patentes “más valiosas” del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) “tienen su nombre”.
“Además, se prestó a hacer esta labor tan importante que es mostrar la necesidad de que la mujer también tenga un papel destacado en la ciencia, tanto a nivel de base como en la dirección”, ha añadido el ministro.
La directora científica del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), María Blasco, ha recordado que fue su “maestra y mentora científica”. “Para mí -ha valorado- ha sido una figura muy importante”.
Salas “ha sido un modelo de que realmente se podía llegar a lo más alto de la carrera científica, para mí y para otras muchas mujeres y hombres de este país”, ha destacado para añadir que también ha sido “muy importante” para la historia de la Ciencia en España y en el mundo.
En ciencia hay más mujeres que hombres haciendo investigación; en el CNIO el 70 % somos mujeres, pero éstas no están representadas por igual en los puestos de toma de decisiones de la investigación. Hasta que eso no sea así habrá mas dificultades para que las mujeres lleguen arriba“, según Blasco.
Y para la oncóloga Ana Lluch, catedrática emérita de la Universidad de Valencia, Salas “fue nuestro bastión”. “La recuerdo como una persona pionera, que nos ha ayudado a establecer que el camino se puede andar, que las mujeres son fundamentales para la ciencia”, ha reivindicado.
Lluch ha lamentado que todo el recorrido de la investigación se ha hecho “sin las mujeres y ha sido una pérdida enorme que ahora tenemos la obligación de recuperar”.
“Margarita nos ha enseñado a ver que es posible y a saber que no hay que tener ningún miedo de no poder llegar y alcanzar la meta que uno se pone”, ha resaltado.
A su juicio, es necesario “reivindicar” el papel de la mujer en la ciencia y e “intentar vencer” todas las “trabas sociales” que lo impiden porque, según ha defendido, “no queremos ser más que los hombres pero sí tener las mismas posibilidades y que se nos considere de igual a igual”.