La mayoría de accionistas de CaixaBank ha votado a favor del proyecto común de fusión con Bankia con el objetivo de impulsar una entidad “más sólida, más eficiente y más rentable” que prevé convertirse en el mayor banco de España, bajo el nombre de CaixaBank, con sede social en València y sedes operativas en Madrid y Barcelona.
Así lo ha anunciado el presidente de CaixaBank, Jordi Gual, durante la Junta Extraordinaria celebrada este jueves en el Palacio de Congresos de València, en una cita que ha calificado de “histórica” para el futuro de la entidad, que cuenta con más de 115 años de historia. Ahora, considera que Bankia será “el mejor socio” para afrontar los retos a los que se enfrenta el sistema bancario.
Más de 15.400 accionistas, entre presentes y representados, han participado en el encuentro, con lo que se ha alcanzado el 70,3% del capital social. El resto del orden del día, que incluía el nombramiento de los nuevos consejeros tras la integración, también ha sido aprobado por la junta.
La junta ha aprobado así la fusión por absorción de Bankia por parte de CaixaBank, con la extinción de la primera y el traspaso en bloque de todo su patrimonio, a título universal, a la segunda. Una decisión que ya fue aprobada también por la junta extraordinaria de accionistas de Bankia el pasado martes, 1 de diciembre, que se celebró también en el mismo Palacio de Congresos de València.
Con la aprobación del proyecto de fusión por parte de los accionistas, se prevé que la fusión se materialice durante el primer trimestre del 2021 -siempre sujeto a que se obtengan las autorizaciones regulatorias y administrativas correspondientes- y que la integración operativa entre las dos entidades se ejecute antes de finalizar 2021.
La ecuación de canje de la transacción se ha acordado en 0,6845 acciones ordinarias nuevas de CaixaBank por cada acción de Bankia, con una prima del 20%. De esta manera, los accionistas de CaixaBank representarán el 74,2% del capital de la nueva entidad y los de Bankia, el 25,8%.
Gual, que ha realizado aquí su última intervención como presidente de CaixaBank, ha defendido la fusión con el objetivo de anticiparse a las exigencias del entorno “en una nueva ola de reestructuración” del sector bancario.
Por su parte, el consejero delegado de CaixaBank, Gonzálo Gortázar, ha asegurado que esta operación es “una gran oportunidad de crear valor para todos los grupos de interés incluyendo, por supuesto, a los accionistas; los de CaixaBank y también los de Bankia”.
Según sus cálculos, la fusión permitirá obtener sinergias en una cifra superior a los 1.000 millones de euros anuales. Dichas sinergias se componen de aproximadamente 290 millones de euros demayores ingresos y 770 millones de ahorro de costes.
Así, se estima que en el año 2022 la rentabilidad sobre capital tangible (RoTE) pueda mejorar entre 1 y 2 puntos porcentuales respecto a permanecer en solitario.
En este momento de incertidumbre como consecuencia de la pandemia, Gortázar ha admitido desconocer la rentabilidad de los próximos años, pero utilizando como referencia los datos del consenso de analistas publicados recientemente, el ROTE en 2022 se podría situar en niveles del 8% y el beneficio por acción mejorar un 28%.
Nuevos nombramientos
Los accionistas han aprobado también el nombramiento de los nuevos consejeros tras la integración: José Ignacio Goirigolzarri Tellaeche, Joaquín Ayuso García, Francisco Javier Campo García, Eva Castillo Sanz, Teresa Santero Quintillá y Fernando Maria Costa Duarte Ulrich.
También formaran parte del Consejo de Administración los actuales consejeros de CaixaBank Gonzalo Gortázar Rotaeche (consejero delegado), Tomás Muniesa Arantegui (vicepresidente), José Serna Masiá, María Verónica Fisas Vergés, Cristina Garmendia Mendizábal, María Amparo Moraleda Martínez, Eduardo Javier Sanchiz Irazu, John Shepard Reed y Koro Usarraga Unsain.