La filial valenciana de Stadler prevé crear más de 500 puestos de trabajo directos para llevar a cabo el 'macropedido' de Renfe de nuevos trenes de Cercanías de gran capacidad, así como hasta 4.000 indirectos en la Comunitat durante los próximos años gracias a otros proyectos.
Así lo ha avanzado su presidente, Íñigo Ferrer, a los periodistas tras una visita a las instalaciones junto al president de la Generalitat, Ximo Puig. Hace unas semanas, Renfe adjudicó a la multinacional suiza Stadler y a la francesa Alstom la adquisición de 211 nuevos trenes de Cercanías de gran capacidad por 2.445 millones de euros para cinco años.
Para Stadler Valencia, con planta en Albuixech, este y otros contratos suponen un “éxito” no solo de la empresa, sino del conjunto de la industria valenciana, un proyecto “de gran valor” que supondrá un fuerte aumento de la carga de trabajo y “un motivo de satisfacción en estos momentos”.
La previsión es que se firme en los dos próximos meses, mientras la fabricación de la ingeniería arranca ahora con la intención de entregar los primeros prototipos en poco más de tres años.
Recientemente, esta compañía también fue adjudicada de la fabricación de 23 convoyes de metro en Nápoles (Italia), con la posibilidad de llegar hasta a 48, ha augurado su CEO dentro de todos los proyectos que aumentarán el empleo.
Por su parte, el president de la Generalitat ha vuelto a destacar el contrato de Renfe para la “consolidación” de Stadler, junto a otras adjudicaciones a nivel internacional. También ha resaltado que los 500 nuevos puestos de trabajo serán de ingenieros, lo que supone “empleo de calidad”.
Esta serie de adjudicaciones va en la línea del objetivo de que la Comunitat Valenciana se posicione como potencia industrial y diversifique su economía.