Año Joaquín Sorolla: tres museos rendirán homenaje al pintor de la luz en el centenario de su muerte

Las principales pinacotecas españolas vuelcan su programación anual en el homenaje a Joaquín Sorolla. En el año en que se cumplen cien de su fallecimiento, el Museo del Prado, el de Bellas Artes de València y el Museo Sorolla han programado numerosas muestras, retrospectivas y análisis de la obra del pintor valenciano, conocido por su tratamiento de la luz en su centenar de obras.

Las muestras programadas siguen un orden cronológico y se desarrollarán entre Madrid, donde se encuentra la casa del artista, y València, su lugar de nacimiento y centro de sus óleos. En la Comunitat Valenciana, las actividades que homenajean al pintor se canalizan a través de una comisión coordinada por Presidencia de la Generalitat, en la que participan la Conselleria de Cultura y el Museo de Bellas Artes, mientras que en Madrid la mayoría están capitaneadas por el Ministerio de Cultura, titular de la Fundación Sorolla.

El Museo de Bellas Artes San Pío V de València quiere ser referente del pintor, y desde el 9 de enero coordinará tres exposiciones en colaboración con otras instituciones públicas y con la Fundación Bancaja (poseedora de obras del artista), a la par que se desarrollen otros actos en la ciudad que se irán desvelando a lo largo del año. En el Prado, donde poseen más de medio centenar de obras del autor, han rescatado numerosos retratos de su primera etapa que se encontraban en el depósito.

Sorolla. Orígenes

La celebración del centenario arranca con la exposición Sorolla. Orígenes, una colaboración del Museo Sorolla de Madrid y el San Pío V de València para repasar los primeros pasos del autor. La muestra analiza la primera producción artística de Sorolla entre los años 1878 hasta 1884, justo antes de su estancia en Roma, uno de los periodos menos conocidos del autor. Es en 1883 cuando Joaquín Sorolla comienza a ser reconocido con la medalla de la Exposición Regional de Valencia, al comenzar su periodo realista, que le llevaría un año después a conseguir la Medalla de segunda clase en la Exposición Nacional.

Los inicios de su carrera se muestran a través de pinturas, acuarelas, dibujos, fotografías y documentos, en un total de 70 obras para la exposición. La muestra puede verse en Madrid hasta el 19 de marzo y en Valencia del 30 de marzo al 11 de junio, en la que será para la pinacoteca valenciana la primera muestra creada expresamente para homenajear al pintor.

Entre los prestadores se encuentran instituciones como las Escuelas de Artesanos, la Fundación Bancaja, la Diputación de Valencia, el Museo Abelló de Mollet del Vallés, el Museo de Montserrat, la Diputación de Barcelona, el Museo de Bellas Artes de Murcia, el Museo de San Telmo de San Sebastián, la Diócesis de Salamanca, el Museo de Historia de Madrid y el Museo Nacional del Prado, además de numerosos coleccionistas particulares.

Nuevas adquisiciones

El pasado mes el Ministerio de Cultura anunciaba la adquisición de tres obras del pintor valenciano para incorporarlas al museo que lleva su nombre. Son los lienzos ‘En la posada’, ‘La esclava y la paloma. Desnudo’ y ‘El oferente’, pintados en 1883, cuando el artista tenía 20 años. “El periodo de formación resulta bastante desconocido para el gran público ya que la mayoría de estas obras se encuentran en colecciones privadas”, recalca el ministerio, que incorpora estas tres obras a la exposición sobre la etapa primeriza del pintor. Por su parte, el Museo del Prado ha adquirido uno de los retratos de Manuel Bartolomé Cossío, propiedad de la familia del historiador, que había sido expuesto en el Museo Sorolla cedido temporalmente, mientras que el Palacio Real programa un acercamiento al artista con una exposición inmersiva.

Colección Masaveu

Durante el verano, del 29 de junio al 1 de octubre, los visitantes del museo de Bellas Artes de València podrán disfrutar de una exposición que recogerá la totalidad de las obras de Sorolla pertenecientes a la Colección Masaveu, realizadas entre 1882 y 1917, tres años antes de su fallecimiento.

Es una selección conformada por obras de temáticas y procedencia diversas, que permiten comprender su evolución pictórica y entender las claves y aportaciones de su arte a través de los diferentes géneros que practicó, donde se aprecia el interés del pintor por las escenas del trabajo en el mar.

Se trata de pinturas de una de las colecciones privadas más importantes de España. Todas fueron adquiridas por Pedro Masaveu Peterson (1938-1993), impulsor de la fundación, que posee la colección privada con mayor número de piezas del artista valenciano, y la tercera en volumen e importancia en el ámbito internacional tras el Museo Sorolla, en Madrid, y la Hispanic Society of America, en Nueva York.