Mientras la Generalitat ruega 1.500 millones de euros al estado para asegurar la sanidad y la educación en 2014, varios estudios revelan que la Comunitat Valenciana podría cuadrar sus catastróficas cuentas si la economía sumergida bajara al nivel de países como Reino Unido o Francia.
El último de estos trabajos es el de 'La economía sumergida en España', de la Fundación de Estudios Financieros (FEF), Según este informe, 130.000 valencianos trabajan en la economía sumergida -2013 acabó con 550.000 parados- y por tanto no ingresan unos 8.000 millones en las arcas públicas.
Si la agencia tributaria –y la conciencia cívica de ciudadanos y contribuyentes- consiguiera rebajar la economía sumergida al nivel de Alemania (un 13%) desde el 18 % actual, la Generalitat podría cuadrar sus ahora deficitarias cuentas, ya que ingresaría unos 2.000 millones de euros más. Otro informe en este campo, Closing the European Tax Gap, incluso augura que si toda la actividad económica fuera legal España pagaría su deuda pública en nueve años.
Sin recursos no hay resultados
Mientras, la Generalitat, pese a sus crónicos problemas de ingresos, no parece dedicar muchos recursos a la recaudación de tributos. El último informe del Ministerio de Hacienda sobre la gestión de los tributos cedidos por las comunidades, mencionado por Información, coloca a la Generalitat a la cola en personal para cobrar impuestos. En 2012, los servicios tributarios del Consell contaban con 280 personas, solo una por cada 18.319 valencianos Únicamente Cataluña está peor, con un empleado por cada 23.959 habitantes.