El gran 'tour' del franquismo: un mapa interactivo recoge los residuos simbólicos de la dictadura en España

El mapa interactivo de los vestigios del franquismo en los espacios públicos ha costado seis meses de trabajo para localizar escudos, monumentos, calles o lápidas desperdigadas por toda la geografía española. El creativo Eduardo España (Madrid, 1991), residente en Costa Rica, ha volcado a la red su trabajo de final de máster en Diseño de la información y Visualización de Datos cursado en el centro Shifta by Elisava, adscrito a la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona.

Con esta novedosa herramienta, el creativo pretende ayudar en la reparación a todas las víctimas del franquismo e impulsar el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica. “Esos emblemas no nos pueden representar, por respeto a las víctimas y porque son ilegales”, dice al otro lado del teléfono el artífice del proyecto.

Eduardo España ha recibido 40 correos electrónicos el día del estreno del mapa corrigiendo errores o aportando nuevos datos, una “respuesta bastante aceptable”. “Es importante la colaboración ciudadana para sacar un catálogo real, sé que hay más placas de vivienda”, asegura el publicista. “Poco a poco quiero ir limpiando la base de datos, la idea es ir actualizándola”, añade. 

En el recuento ha detectado 5.340 símbolos franquistas. El creador advierte de que aún faltan símbolos franquistas por incorporar “debido a la complejidad de la recogida de datos” y confía en que la visualización del mapa quede “desfasada” por la retirada de los vestigios de la dictadura. Calcula que ha podido reseñar la mitad de los vestigios del franquismo que aún existen en España.

La herramienta interactiva propone una suerte de tour turístico que recorre, entre otros, el monumento a Carrero Blanco en Santoña (Cantabria), el monumento a los caídos en la Batalla del Ebro de Tortosa (Tarragona), el monumento a la victoria en Santa Cruz de Tenerife y, cómo no, el Valle de los Caídos.

En una primera fase de búsqueda, el creativo Eduardo España consultó los repositorios de datos de las diputaciones provinciales, pero ante la limitada información (muchos están en proceso de construcción o directamente no están disponibles), el investigador recurrió a asociaciones memorialistas y a partidos políticos que habían confeccionado sus propias bases de datos.

La búsqueda se completó con noticias de medios de comunicación, tesis doctorales y con la lista de denuncias elaborada por el Ministerio de Justicia para pedir la retirada de esta simbología de cientos de municipios españoles. El proyecto ha contado con los datos recopilados por el senador de Compromís Carles Mulet en una campaña que consiguió la eliminación de 2.000 símbolos franquistas en toda España.

Tras esta primera fase de búsqueda, Eduardo España clasificó los vestigios detectados entre escudos y relieves, monumentos y conjuntos, calles y lápidas e inscripciones. Estas cuatro variables principales se complementan con otras como la población de los municipios y el partido político que gobierna en la actualidad, entre otras. Después de la clasificación, a cada referencia del mapa se le añadieron las coordenadas geográficas mediante la herramienta de Google Geocode.

El trabajo ha detectado que el 62% de las provincias no cuenta con un catálogo de vestigios franquistas. “Nadie se lo ha tomado en serio y las comunidades autónomas y los ayuntamientos son los responsables”, denuncia el publicista, que también lamenta que “no hay estándares de catalogación”. 

La recopilación de datos también muestra que 419 municipios gobernados por el PP no han procedido a retirar los símbolos franquistas, frente a los 284 consistorios gobernados por el PSOE. Tampoco han procedido a retirar los vestigios de la dictadura 245 iglesias, 147 edificios institucionales y 4.078 comunidades de vecinos. “Ojalá desaparezca algún día el mapa, sería lo ideal”, dice Eduardo España.