Siguen desgranándose datos sobre la presunta financiación irregular del Partido Popular relacionada con las empresas de la trama Gürtel que dirigía Francisco Correa -y concretamente con su filial Orange Market de Álvaro Pérez (El Bigotes)- correspondientes a los ejercicios de 2007 y 2008, coincidiendo con las campañas de las elecciones municipales, autonómicas y generales.
Según las declaraciones de los inspectores de Hacienda el pasado 6 de marzo ante el juez José Ceres, encargado del caso en Valencia, el PP disponía de una gran cantidad de dinero en metálico, con la que habría pagado hasta 2,3 millones de euros en efectivo a Gürtel, tal y como apunta el diario El País.
Así, entre 2007 y 2008, los populares -que según un informe de la Agencia Tributaria habrían percibido ilegalmente de Gürtel 3,5 millones de euros en ese periodo- habrían abonado a las empresas de Correa hasta 5,8 millones de euros, de los que sólo 1,2 millones corresponderían a facturas emitidas al PP.
El resto se abonó en 'b', sin factura o con facturas falsas emitidas a terceros, la mayoría empresas de la construcción y obra pública. Sin embargo, los gastos corresponden a servicios prestados a los populares valencianos por los que Gürtel, según confirman los inspectores de Hacienda, conseguían un margen de beneficio “muy elevado”, del 84% en 2008.
Diversas empresas constructoras, que eran a la vez adjudicatarias del Consell de Francisco Camps y que tenían intereses urbanísticos en ayuntamientos como el de Alicante, habrían pagado hasta 1,2 millones de euros a Orange Market con los que supuestamente se financió el Partido Popular.