Lotería, donaciones de empresarios y 'pitufeo': Alianza Cívica amplía su denuncia contra Vox en el Tribunal de Cuentas
Venta de lotería, merchandising y supuestos sobres con donaciones de empresarios presuntamente blanqueadas con la técnica del 'pitufeo'. Las presuntas irregularidades en la financiación de Vox, reveladas por varios antiguos cargos de la formación ultra, siguen en manos del Tribunal de Cuentas tras la denuncia presentada por un partido de reciente creación, Alianza Cívica. La formación ha presentado ante el Tribunal de Cuentas una ampliación de su denuncia inicial que recoge las presuntas irregularidades en las cuentas de Vox en Valencia, Alicante y Castellón.
El escrito dirigido a la Fiscalía del Tribunal de Cuentas, al que ha tenido acceso elDiario.es, sostiene que Vox ha esquivado “de forma sistemática y organizada” la ley de financiación de partidos políticos mediante el “fraccionamiento de donaciones de procedencia opaca”. El objetivo, según el escrito de Alianza Cívica, pasaba por financiar las campañas electorales de la formación ultra “esquivando las restricciones de gasto máximo”.
El testimonio de la vicesecretaria de Recursos de Vox en Valencia, que actuaba como gerente y realizaba funciones de tesorera, cobra una “relevancia extraordinaria”, según el escrito. La mujer, cuya denuncia archivó la Fiscalía, describe una organización “altamente irregular” con una contabilidad A (registro de las entradas y salidas de dinero declaradas) y una supuesta caja B, en la que se anotarían las “abundantes entradas de efectivo procedentes de múltiples fuentes, en muchas ocasiones desconocidas o poco claras”. La exresponsable de Vox en Valencia asegura que el supuesto sistema de financiación irregular contaba con “pleno conocimiento y aquiescencia” de la dirección nacional del partido.
El escrito presentado ante el Tribunal de Cuentas relata que “era habitual” que el presidente del partido en Valencia, José María Llanos, comiera o mantuviera reuniones con empresarios, “tras las cuales regresaba a la sede con múltiples sobres conteniendo elevadas cantidades de dinero en efectivo”. “Gran cantidad de este dinero, se almacenaba en la sede para sufragar los gastos personales de sus dirigentes o los gastos no declarados de las campañas electorales, pero otra parte debía ser ingresada al partido”, agrega la ampliación de la denuncia.
Los fondos se blanqueaban, supuestamente, mediante su fraccionamiento por parte de “personas interpuestas de máxima confianza de los líderes”, a quienes se pedía que los ingresaran, en cantidades de entre 1.000 y 2.000 euros a su nombre en concepto de donaciones al partido (el método del 'pitufo' que, precisamente se investiga en una de las piezas separadas del 'caso Taula' en relación a la presunta financiación ilegal del PP del Ayuntamiento de Valencia).
La denuncia asegura que la venta de merchandising del partido desempeñaba un “papel central y clave”. “Este modus operandi se hace especialmente evidente en las mesas que se organizan con la ocasión de visitas y mítines de los dirigentes nacionales”, añade el escrito, en el que se detallan los asientos contables correspondientes a las ventas con ocasión de visitas a Valencia de dirigentes como Javier Ortega-Smith o Iván Espinosa de los Monteros, así como un mitin de campaña del líder de Vox, Santiago Abascal.
Las cuentas de Vox en Valencia, según la denuncia de Alianza Cívica, reflejan las “frecuentes y abultadas salidas de caja” para los supuestos “gastos personales” del vicesecretario de relaciones institucionales, Joaquín Díaz Andrés, o del presidente provincial y diputado autonómico José María Llanos. Estas supuestas irregularidades son “sobradamente” conocidas por parte de la cúpula de Vox, denuncia el escrito.
Otro supuesto método denunciado es el de “doble venta” o “doble recargo” de los productos de mercadotecnia. Los productos oficiales de Vox se obtenían, previo encargo de las direcciones provinciales, de la sede central del partido ultra en Madrid. En uno de los anexos de la ampliación de denuncia, Alianza Cívica asegura que una bolsa de un centenar de pulseras de Vox se pagaba “por escasos 16 euros” a la sede nacional y se revendían por 200 euros.
El escrito aporta una serie de capturas de conversaciones de Whatsapp con José Pedro Martínez Carrión, secretario provincial de Vox en Valencia, en las que “se ve claramente cómo se camuflan gastos que quedarían fuera del presupuesto aprobado para la campaña por la junta electoral, pagándose mediante dinero de las donaciones” y en las que se alude a los ingresos por las ventas durante una visita de Santiago Abascal a un mitin en la capital valenciana.
La denuncia también recoge presuntas irregularidades detectadas por el excoordinador de Vox en Benicàssim, quien asegura que el supuesto sistema de fraccionamiento de donaciones era “habitual”. En 2018, Vox en Castellón obtuvo unos beneficios de 1.725 euros por la venta de lotería, unos fondos que “al no poder ingresarse de una vez por no identificar adecuadamente a los donantes, se depositaron divididos en seis ingresos en las cuentas” de una entidad bancaria. Los albaranes de ingreso se remitían “directamente” a la presidenta provincial, Llanos Massó, “quien supervisaba personalmente toda la operativa”.
El escrito dirigido a la Fiscalía del Tribunal de Cuentas considera que la dirección nacional de Vox tenía conocimiento de las denuncias de presuntas irregularidades al haber recibido correos, burofaxes y dossiers, “sin que en ningún caso actuasen para investigar los hechos”. La ampliación de la denuncia, dirigida contra Santiago Abascal, el tesorero y el Comité Ejecutivo Nacional de Vox, considera que los hechos podrían ser constitutivos del presunto delito de financiación ilegal de partidos políticos y que los indicios aportados apuntan a otros supuestos delitos, como blanqueo de capitales o pertenencia a organización criminal.
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