La manifestación convocada por sectores de la ultraderecha valenciana bajo el lema “Somos valencianos, somos españoles, no a los países catalanes” ha centrado este sábado sus ataques sobre Carles Puigdemont, para quien los participantes han reclamado prisión, pero también sobre dirigentes de Compromís como el alcalde de Valencia, Joan Ribó, y el conseller de Educación de la Generalitat Valenciana, Vicent Marzà.
La marcha, convocada formalmente por la denominada Coordinadora d'Entitats Culturals del Regne de Valencia, ha reunido este sábado a unos miles de personas, en una participación muy inferior a la que pretendían sus organizadores, que han recorrido el centro de Valencia entre la plaza de España y la plaza de América, y ha sido capitalizada por dos figuras de la derecha más radical, como Juan García Sentandreu, vinculado a grupos anticatalanistas y blaveros, y Cristina Seguí, exdirigente de Vox.
Ambos han tenido un lugar destacado en la pancarta que abría una marcha plagada de banderas españolas. García Sentandreu ha justificado la convocatoria “ante las agresiones del nacionalismo catalán y catalanista, que pretende hacer de la Comunitat Valenciana una parte de sus falsos países catalanes”. Ha añadido que ese nacionalismo “está adoctrinando a los niños en las escuelas”.
Una marcha recorre València contra el nacionalismo catalanista para decir 'no' a los “païssos inventats”
eclamado a las instituciones que defiendan a la sociedad valenciana “ante las agresiones del nacionalismo catalán y catalanista, que pretende hacer de la Comunitat una parte de sus falsos países catalanes”. En la misma línea, ha lamentado que este nacionalismo “está adoctrinando a los hijos en las escuelas para crear una base social que vote en el futuro esa mentira que son los países catalanes”.
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