Nos están matando. No más gestos

Hace días, muchos, que no escribo. La última vez que lo hice, el alcalde de Alicante todavía era Miguel Valor y el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra. Y, por supuesto, no hacía tanto calor. En este tiempo ha habido muchos cambios. Cambios en consellerias, en concejalías, nuevos asesores, nuevos equipos… ¡Lo normal tras un cambio de color político en el gobierno local y autonómico! Y también ha habido cambios en algunos planteamientos. En Alicante, el sector comercial es el más activo: Ikea, festivos, veladores, tardeo…, pero también ha habido otros cambios:

-Ha cambiado la fecha del inicio de curso escolar. Nuestros niños tienen 7 días más de vacaciones.

-Han desaparecido los coches oficiales en muchos ayuntamientos. Nuestro alcalde no va en bici a trabajar, pero es que Alicante tiene muchas cuestas.

-La bandera arco iris ha ondeado en el balcón consistorial con motivo del Día del Orgullo Gay.

-El valenciano vuelve a estar ‘in’.

-Ahora se abren procesos públicos para elegir asesores en la formación nacionalista del tripartito y en la más cercana a Podemos. En otras, no.

-Ya no más Dyango ni José Manuel Soto en las noches del Castillo. Ahora se subvenciona Alicante Rock…

-Mientras Sonia Castedo y Miguel Valor ya cuelgan en las paredes del Salón Azul, el busto del Rey Juan Carlos en el Ayuntamiento se tambalea.

-Han desaparecido los alcaldes pedáneos.

-Concejales del equipo de gobierno devuelven sus entradas ‘vip’ para asistir a los eventos.

-Hay ediles que ya no van con chaqueta y corbata, incluso hay asesores pelín hipsters.

-…

Pero hay algo que no cambia. Nos siguen matando. Las políticas de gestos no valen para frenar los asesinatos de mujeres. No vale un minuto de silencio. No vale uno, dos, tres días de luto oficial…no valen los buenos propósitos. Hacen falta acciones. Empezando por la educación. Políticas de igualdad desde la infancia. Que nuestras adolescentes sepan que los celos no son una expresión de amor, que si el chico que te gusta te pide la contraseña del móvil no significa que esté colado por ti ¡oh tal vez sí!, pero está enfermo… ¡se cree que le perteneces!

Que los pequeños sepan que sus compañeras de cole pueden jugar al fútbol igual que ellos. Y que habrá compañeros a los que no les guste el fútbol. Que papá puede planchar y mamá sostener la economía familiar.

Cuando el principal debate político es quién se encargará de la recaudación, cuándo se suprimirá el himno de España en las procesiones o si se prohíben las corridas de toros mientras se asesina a mujeres y a niños algo está fallando. No son muertes, son asesinatos. Y no nos podemos quedar sólo con los gestos.