El complejo hotelero Sidi Saler, ubicado en el corazón de la Devesa del Parque Natural de la Albufera de València, podría obtener una prórroga de su concesión administrativa por 30 años más. Así lo prevé el informe favorable de la Demarcación de Costas de València y contra el que ha alegado el colectivo Acció Ecologista Agró.
La entidad conservacionista afirma que la petición de los actuales propietarios, los bancos BBVA y Caixabank, “pretende legalizar una actividad insostenible e incompatible con los valores naturales de la Albufera”. Agró, además de alegar contra esta prórroga, también exige la expropiación y el derribo del hotel, calificado también como 'el Algarrobico valenciano'.
AE-Agró advierte que este informe favorable de Costas podria suponer “un fraude al ordenamiento jurídico”, ya que los actuales propietarios del hotel “tenían hasta 2008 para formular esta petición, que finalmente realizaron en 2016, ocho años después de expirar el plazo legal”.
Además, en el expediente favorable de la Demarcación de Costas, que todavía necesita el visto bueno definitivo del Ministerio de Medio ambiente, falta el informe medioambiental de la Generalitat Valenciana. Así advierten de la irregularidad de que, en lugar de pedirse a la Conselleria de Agricultura, Medio ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, lo ha solicitado a la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, “que no lo ha redactado al ser una administración incompetente para tal efecto”.
Advierten de este modo que “la falta de informe medioambiental constituye un defecto de nulidad de pleno derecho para infringir una norma de rango superior” y, por lo tanto, obliga a la retroacción de las actuaciones antes de la resolución del expediente, con solicitud de informe al órgano medioambiental competente. Por otro lado Agró destaca que el Ayuntamiento de València, a quien pertenece administrativamente la Albufera, sí que emitió un informe medioambiental negativo, “el contenido del cual Costas ha ignorado en el trámite de la petición de renovación de la concesión del Sidi Saler”.
AE-Agró añade que, además de omitir el informe medioambiental preceptivo, el expediente de Costas también “omite cualquier reflexión sobre las alternativas a la concesión, estudio necesario para la valoración del impacto de cualquier medida que influya en el medio ambiente”. “La declaración de Parque Natural, como es el caso de la Albufera, comporta la declaración de utilidad pública y en cualquier momento se puede optar por la expropiación”, señala el colectivo ecologista, que también indica que “la ubicación de la Algarrobico valenciano en terrenos del dominio público marítimo-terrestre también permite desde el punto de vista legal su expropiación”.
En este sentido, tal y cómo advierte el Servicio Devesa-Albufera del Ayuntamiento de València, la concesión planteada por Costas no considera que la actividad del hotel se paralizó en enero de 2011 y que, por lo tanto, la concesión se encuentra extinguida desde entonces. “Así que renovarla ahora implicaría rehabilitar el derecho de los bancos a la explotación económica del inmueble, aumentando el valor de expropiación del Sidi Saler, con el consecuente perjuicio para el erario público y dificultando así la ejecución de esta medida alternativa a la renovación de la concesión”.
AE-Agró concluye exigiendo “una vez más, a las administraciones implicadas en este conflicto medioambiental, la expropiación y el derribo del Algarrobico Valenciano, para completar así la imprescindible regeneración del cordón dunar de la Devesa del Saler”.
Respuesta
Desde la Subdirección General de Dominio Público Marítimo Terrestre se ha matizado la información afirmando que ha solicitado documentación adicional a los solicitantes de la concesión. Así apuntan que todavía están pendientes de su entrega y envío.
De este modo explican desde Costas que hasta que no se reciba esta documentación requerida no proseguirá la tramitación que se decidirá en la resolución de la solicitud de concesión de ocupación del Dominio Público Marítimo Terrestre.