El pasado jueves 8 de Marzo vivimos una jornada histórica en la que mujeres de más de 170 países, incluso en aquellos donde aún se lucha por la igualdad legal como Turquía o Arabia Saudí, nos levantamos para acabar con las injusticias y las discriminaciones que sufrimos sólo por razón de nuestro género.
La convocatoria de huelga y posterior manifestación fue todo un éxito, especialmente en España. Los medios de comunicación extranjeros nos pusieron de ejemplo debido a las impresionantes cifras de seguimiento y participación: un millón de personas se manifestaron en Madrid y 5.3 millones siguieron los paros parciales en todo el estado según UGT y CCOO. Sólo en nuestra ciudad, València, 100.000 personas salieron a las calles esa tarde. El recorrido se colapsó hasta tal punto que la cabecera había llegado al final cuando los grupos que se encontraban a la cola no habían podido salir aún.
Una de las consignas más utilizadas fue “no tenemos miedo”, y justamente esa falta de miedo es la que ha hecho que las mujeres rompamos el silencio y digamos basta ya. Basta ya de una violación cada 8 horas, de trabajar lo mismo que nuestros compañeros y cobrar un 23% menos, del acoso callejero y del medio centenar de asesinadas por violencia de género. Las mujeres hemos tomado conciencia de clase alienada y mediante un ejercicio de sororidad vamos a apoyarnos y luchar juntas para cambiar el mundo. Los partidos de derecha se han apuntado a la igualdad a última hora, con discursos vacíos y meros fines electorales, intentando liderar el discurso y negando su rechazo a la causa. El movimiento feminista es lo suficientemente potente como para no necesitar el paternalismo de ningún “líder” de la derecha, señor Rivera.
Después del 8 de marzo toca transformar estas reivindicaciones en medidas concretas, convertir en realidad aquello reclamado en las calles. La igualdad y el feminismo tienen que ser valores transversales de nuestro día a día y toda la ciudadanía debemos ser parte activa de esta transformación que ya está, poco a poco, ocurriendo. El día 7 nos levantamos con la primera mujer rectora de la Universitat de València, y el 9, con las manifestaciones más numerosas desde la Transición. 2018 va a ser el año de las mujeres.
Meme Elizalde es secretaria de igualdad y LGTB de Joves Socialistes de la ciudad de València