Una ballena jorobada de 12 metros y 25 toneladas que fue avistada en Mallorca ha muerto junto a la costa del municipio valenciano de Tavernes de la Valldigna, a la que llegó “extremadamente débil” y con varios cortes en la aleta dorsal.
Técnicos de rescate de la Fundación Oceanogràfic, a través de la Red de Varamientos de la Comunitat Valenciana, han evaluado el estado del animal tras llegar a la playa junto a agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local, técnicos del Ayuntamiento de Tavernes y del ministerio en un operativo desarrollado durante este jueves.
Fuentes del Oceanogràfic de València han informado de que la ballena fue avistada y desenmallada hace unos días en Cala Millor, en Mallorca.
Tras certificar su muerte se ha comenzado a evaluar la posibilidad de sacarla a la arena para proceder a realizarle la necropsia y poder conocer las causas de la muerte. El tamaño de la ballena y su cercanía a la costa han complicado el operativo de remolcarla a mar abierto, ya que el animal presentaba varias heridas en la aleta dorsal y era incapaz de seguir nadando.
“Dada la grave condición y su tamaño, las posibilidades de rescate eran nulas. Le generaríamos más lesiones y complicaría su condición y, posiblemente, mañana aparecería de nuevo en la arena”, ha explicado José Luis Crespo, responsable de Conservación de la Fundación Oceanogràfic.