“Un maltrato singular necesita una reparación singular”, ha asegurado este jueves a eldiario.es en relación con la injusta financiación autonómica la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Mónica Oltra, de Compromís, quien ha lamentado que el president, el socialista Ximo Puig, no consultara el miércoles con sus socios de gobierno el cambio de postura para votar en el Consejo de Política Fiscal y Financiera a favor del objetivo de déficit propuesto por el Gobierno. Una maniobra que ha abierto una crisis en el seno del Ejecutivo valenciano apoyado en el Pacto del Botánico suscrito por el PSPV-PSOE, Compromís y Podemos.
En opinión de Oltra, los 850 millones y la refinanciación de 1.000 millones de deuda ofrecidos por el Gobierno para que Puig cambiara de posición “son humo”, ya que, o bien se derivan de una capacidad de endeudamiento de la que se benefician todas las comunidades autónomas al haberse aumentado el límite de déficit, o bien proceden del cobro pendiente de IVA, con el que ocurre lo mismo.
La única medida aparentemente específica serían los 350 millones de deuda del consorcio que organizó la Copa del América en Valencia de los que se hará cargo la Administración central. Y Oltra considera que no cubre la totalidad de la deuda de ese ente, que es de 460 millones, cuando sí que se asumieron en su momento deudas similares por los Juegos Olímpicos de Barcelona o las exposiciones universales de Sevilla y Zaragoza.
“De euros contantes y sonantes, ni uno”, se lamenta la vicepresidenta valenciana y líder de Compromís, que se confiesa muy molesta con los socialistas. “Si este va a ser el modus operandi, la cosa va a estar complicada”, indica tras recordar que el valenciano “no es un gobierno socialista sino de coalición, sostenido por tres formaciones”.
Oltra espera ver a Ximo Puig este domingo en Morella, la ciudad del presidente valenciano, en una visita a las fiestas del Sexenni a las que ha sido invitada por el alcalde. Unas fiestas a las que este jueves ha acudido el presidente de las Corts Valencianes, Enric Morera, también de Compromís, que se ha fotografiado con Puig por las calles de la capital de la comarca de Els Ports.
La legislatura del Gobierno del Botánico se ha basado en “la lealtad, la comunicación, el acuerdo y el consenso”, indica Oltra, que ve cómo se complica la situación. Y extiende su reflexión al Gobierno de España, presidido por Pedro Sánchez: “Tiene 84 diputados, no puede gobernar como si tuviera mayoría absoluta”. Según la dirigente de Compromís, “en democracia, si no tienes mayoría absoluta, has de negociar”. Un ejercicio al que Compromís emplaza al Gobierno para plantear un eventual voto favorable a sus propuestas presupuestarias. “Nuestros votos son valiosos”, advierte Oltra en referencia a los cuatro parlamentarios de la coalición en el Congreso.
Dos propuestas “viables” para la ministra de Hacienda
Precisamente, el portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, ratifica los mismos argumentos en declaraciones a ediario.es. En la oferta del Gobierno “no hay novedad”, dice, solo “más capacidad de endeudamiento” y un “pequeño avance” en la deuda de la Copa América, una herencia del PP que en su opinión ya debía haberse asumido.
“Hemos hecho que el Gobierno empiece a mover ficha”, indica Baldoví, que recuerda que los diputados socialistas valencianos ya apoyaron el objetivo de déficit del Gobierno en la primera votación, en la que fue rechazada la propuesta. No así los de Compromís, que se abstuvieron y solo cambiarán de postura, para que el Gobierno de Sánchez pueda sacar adelante sus líneas macroeconómicas, “si hay avances significativos”.
El portavoz de Compromís resume en “dos cosas viables” y “un calendario para abordar la reforma de la financiación autonómica” las exigencias que pondrá sobre la mesa de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. La primera consiste en que el Gobierno reparta los 1.966 millones de remanente sin gastar del Fondo de Competitividad. Eso haría llegar, según sus cálculos, 618 millones de euros a la Generalitat Valenciana. La segunda consiste en una modificación de la ley del PP que subió los tipos del IVA y el IEE y redujo el Fondo de Suficiencia Global. “Supondría para los valencianos la entrada de unos 1.226 millones de euros en caja”, sostiene Baldoví.
En Compromís creen que es el momento de hacer valer su fuerza parlamentaria: “Nosotros votamos a favor de la moción de censura que derribó a Rajoy y llevó a Pedro Sánchez al Gobierno”, recuerdan, pero su apoyo no va a ser incondicional, sobre todo en una reivindicación como la de la reforma de la financiación autonómica desde la sociedad más perjudicada por el actual modelo.