Por segundo verano consecutivo, Marina Salud, la concesionaria sanitaria de la comarca, ha dejado sin servicio de Pediatría a aproximadamente unos mil niños de 11 poblaciones del interior de la Marina Alta cuya atención primaria depende del centro de salud de Orba. Es decir: Parcent, Murla, Benigembla, Castell de Castells, Sagra, El Ràfol d’Almúnia, Benimeli, Sanet i Negrals, Tormos y La Vall de Laguar.
Las familias de las localidades afectadas ya han elevado su protesta por los trastornos que ocasiona: “Las niñas y los niños han de ir al médico de cabecera para ser atendidos y de esta forma tememos que no se están llevando a término de forma correcta las revisiones mensuales, las vacunas o las consultas”, señaló una madre a este periódico.
En la misma línea, el concejal de Bienestar Social de Orba, Francesc Roig, indicó que “no ponemos en duda la profesionalidad del médico de cabecera, pero hay que tener en cuenta que es una especialidad distinta y que muchas veces receta un fármaco distinto del que dispensaría el pediatra; y eso crea inquietud en las familias”, añadió.
La otra opción que ofrece la empresa es acudir al pediatra de Pego. Pero se también se trata de una solución discutible, ya que esa localidad se halla de los municipios afectados a una distancia que en ocasiones supera los 30 kilómetros por las carreteras del interior de la comarca.
En principio, como ya sucedió el año pasado, Marina Salud tenía previsto cubrir la baja del pediatra al menos en el mes de julio. De hecho, el sustituto se tenía que haber incorporado el pasado día 9. Pero finalmente, según Roig, no ha aceptado el contrato que le ofrecía la concesionaria. Así que ahora mismo sigue sin haber especialista.
Lo que es seguro es que no habrá atención en agosto. Para ese mes, la concesionaria insiste en desviar a las familias a Pego. También arguye que ahora mismo en la zona no existe ninguna urgencia que haga imprescindible una atención más especializada “pero ésta se puede producir en cualquier momento”, alerta Roig.
“Defender a nuestros vecinos”
El edil subrayó que ha habido vecinos que han ido a quejarse al Ayuntamiento de Orba y que lo mismo ha sucedido en otras poblaciones implicadas “porque éste no es un problema local, es una situación absolutamente insólita de carácter comarcal y por eso nos hemos movilizado, para defender a nuestros vecinos”. De hecho, y como ya sucediera el pasado año, este consistorio ha presionado a la mercantil para resolver esta situación. “Hemos hablado con la coordinación médica y de enfermería del centro de salud y nos consta que han hecho todo lo posible, pero por ahora sin resultado”.
Para este concejal el problema no son los profesionales, a los que reconoce su esfuerzo, sino la filosofía de la empresa: “Ponemos en duda qué condiciones laborales habrá ofrecido la concesionaria al sustituto para quelas rechazara; es lo que ocurre cuando una empresa funciona en base a criterios monetarios y no de servicio público, y lo que nos hace seguir abogando por la reversión”, argumentó Roig.