Los presupuestos de la Generalitat Valenciana y su propuesta fiscal y tributaria se debatirán en el mismo foro político. Los partidos que componen el Pacto del Botánico (PSPV, Compromís y Unides Podem-Esquerra Unida) comenzarán en las próximas semanas a negociar las cuentas públicas para 2023, último ejercicio de la legislatura y el que, aspiran, sea el primero de la tercera reedición del pacto progresista.
La negociación, aun liderada por Hacienda, será la más participativa hasta la fecha. Contará con las propuestas de los presupuestos participativos que traslada la Conselleria de Participación y calidad democrática, con una comisión negociadora en la que se representen las tres fuerzas del Botánico y con las aportaciones de los agentes sociales. Esta comisión, una de las exigencias de los socios de Gobierno para evitar disfunciones en la confección de las cuentas, tratará también la reforma fiscal y la adaptación de los tipos impositivos a la inflación, con el objetivo de evitar que el aumento de precios de consumo se traslade en más presión para las rentas bajas. La reforma o revisión fiscal se prevé una de las cuestiones más controvertidas en el debate, dado el distinto grado de exigencia de los socios.
La vicepresidenta del Consell, Aitana Mas, ha insistido este miércoles tras la reunión de coordinación con su grupo parlamentario, Compromís, en que las cuentas públicas tendrán tres ejes transversales: la lucha contra el cambio climático, el refuerzo de los servicios públicos y “combatir, desde las políticas de empleo y economía, la inflación que está haciendo que las familias valencianas estén padeciendo grandes problemas para llegar a fin de mes”. Como apuntaron los dirigentes tras el seminario de Alcoi, la acción de gobierno tendrá como máxima prioridad mitigar el impacto de una posible crisis.
Los partidos del Pacto del Botánico abogan por trasladar una visión más calmada de la negociación alejada del conflicto habitual en estas cuestiones. “Los ciudadanos valencianos están esperando una respuesta de su gobierno” que “pasa en un primer momento por los presupuestos”, ha aseverado Mas.
Puig invita a patronal y sindicatos a colaborar
El presidente de la Generalitat quiere que estas cuentas públicas sigan la línea participativa de los presupuestos elaborados tras la pandemia, que partieron de una comisión de reconstrucción. En este caso, Puig, tras presidir la mesa de diálogo social, ha invitado a patronal y sindicatos a realizar aportaciones en el debate presupuestario y tributario y ha garantizado que se escucharán sus propuestas.
Según Puig, la reforma fiscal en la que trabaja el equipo liderado por Arcadi España se analizará en el seno del Gobierno para finalmente “codecidir” de forma dialogada con los agentes sociales aunque “sus aportaciones en algún caso pueden ser contradictorias”. “Con la política fiscal limitada que tenemos, intentaremos hacer una cirugía fina para apoyar a las personas y familias que más lo necesitan”, ha reiterado, y ha mostrado su confianza en que la reforma será “decisiva dentro del marco de limitaciones”. En todo caso, el presidente insiste en que no habrá una bajada generalizada de impuestos como reclama la derecha, porque sería “una irresponsabilidad”.
En la reunión, que ha contado con los vicepresidentes Aitana Mas y Héctor Illueca, también se ha analizado el nivel de ejecución de los programas de ayudas impulsados por la Generalitat. Está en marcha el plan 'Reactiva' con el 65% del medio centenar de medidas que lo conforman en ejecución y una decena de ellas cumplidas, especialmente las vinculadas a frenar la inflación