La papeleta en discusión en Bonrepòs i Mirambell que suponía que un concejal del ayuntamiento fuera para el PP o para Compromís finalmente se le contabiliza a la coalición, y con ello además se desbloquea del mismo modo la constitución de la Diputación de València.
La disputa del concejal ha pasado por diferentes estancias hasta llegar al TSJCV que ha dado la razón a Compromís y así mantendrá cuatro ediles en el pleno municipal. El origen fue el apretado resultado que se obtuvo en una mesa en Bonrepòs i Mirambell, lo que provocó que Compromís pidiera en la Junta Electoral de Zona (JEZ) la revisión del recuento y consiguiendo que se le aceptaran votos que inicialmente fueron declarados nulos. Entre ellos había una papeleta que se interpretó inicialmente que estaba tachada, pero después se interpretó que era un trazo que no invalidaba el voto por entenderse que rodeaba el nombre de la candidatura con la intención de resaltarla.
Pero ante la resolución el PP prosiguió su batalla interponiendo un recurso que fue desestimado en la JEZ de València pero los populares elevaron otro recurso a la Junta Electoral Central (JEC) aludiendo al “principio de inalterabilidad”, y que determinó que se debía computar como voto nulo.
El siguiente paso lo dio Compromís al llevar el asunto a la sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJCV que ha dado la razón a Compromís. El tribunal, con dos votos particulares, estima el recurso interpuesto por Compromís contra el acuerdo de la Junta Electoral de Zona de València de proclamación de electos del municipio, de fecha 7 de junio, y se declara válida la inicialmente acordada por este órgano, antes de su modificación que la ajustó al acuerdo de la Junta Electoral Central.
Contra este sentencia solo cabe recurso de aclaración, sin perjuicio del de amparo ante el Constitucional. Así el tribunal, que reconoce que la interpretación “no es sencilla”, apunta que no es discutido que el trazo en la papeleta fue voluntario, pero señala que el problema radica en la consecuencia que pueda acarrear. En este sentido, recalca que frente a una interpretación “literalista” de la Loreg asumida por la JEC, proyectando este caso a lo que establece el TC, la papeleta debe considerarse válida y conceder el voto a Compromís.
Al respecto, resalta que no se produce necesariamente la nulidad de los votos emitidos en papeletas en las que se haya efectuado una señal junto al nombre de los candidatos; y considera que en este caso no se planten dudas sobre la voluntad del elector sobre el sentido del voto a favor de la candidatura de Compromís, dado que los trazos realizados, para la sala, “acentúan” o “subrayan” la voluntad del elector a su favor. Así, entienden que los círculos señalando toda la candidatura son “una inequívoca reafirmación del voto, no ya incluyendo un nombre de la lista cerrada sino de toda la candidatura”. Precisamente, la discusión sobre este concejal y el recurso presentado ante el TSJCV por Compromís ha hecho que la constitución de la Diputación de Valencia se retrase, con vistas a, por lo menos, el 20 de julio hasta que se resolviera esta cuestión y quedara a su vez conformado de forma definitiva el consistorio.
El conflicto generado por este voto fue el motivo por el que se pospuso la constitución de la Diputación de Valencia hasta, como mínimo, el 20 de junio, aproximadamente un mes mas tarde que el resto de instituciones provinciales.