Desafío en toda regla a la línea roja marcada por la presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig. Los ediles del grupo municipal del PP del Ayuntamiento de Valencia, imputados por el presunto lavado de dinero negro para financiar la campaña electoral, no entregarán el acta de concejal tal y como habían acordado con la dirección autonómica. Y lo han hecho utilizando la tesis de su anterior jefa, la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá, que este martes ha reiterado que los estatutos del partido marcan la dimisión en la apertura del juicio oral.
“Vamos a seguir trabajando en el grupo municipal popular, ya que en el sumario no hay indicios probatorios del supuesto blanqueo ni un auto del juez pidiendo nuestra imputación”, ha afirmado el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia, Alfonso Novo, que ha comparecido respaldado por todos los concejales del grupo, incluido el único que no está imputado en la causa, Eusebio Monzó. “Los estatutos marcan el límite en el juicio oral. Si se llegara desgraciadamente a esa situación tomaremos la decisión oportuna. Pero vamos a trabajar para que no ocurra y estamos convencidos de que no va a ocurrir”, ha asegurado en nombre del todos los concejales imputados del PP.
Novo ha anunciado que una vez “han estudiado el sumario judicial” y han concluido que “no hay pruebas concluyentes” del presunto lavado, van a pedir el sobreseimiento de la causa. Y ha recalcado varias veces: “No habido enriquecimiento personal, ni comisiones, ni mordidas, ni financiación ilegal”. En defensa de los concejales del PP, el que fue mano derecha de Barberá ha insistido varias veces en que las pruebas que hay “provienen del entorno de Alcón [esposa del exvicealcalde de Valencia, Alfonso Grau] y de una grabación que se hace un día después de que le haya pinchado el teléfono la Guardia Civil”.
El portavoz del PP en la corporación -pese a la suspensión de militancia que supuestamente pesa sobre él- también ha contraargumentado las declaraciones de los asesores que confesaron el método urdido supuestamente para lavar dinero procedente de la caja B del partido. “No todos los concejales ni asesores que están ahora en el grupo municipal realizaron la aportación de mil euros, ya que expresaron que no podían”, ha dicho, para censurar: “No hemos despedido a nadie por no poder realizar dicha aportación como dicen en las testificales del entorno de Alcón”. Desde el grupo municipal, cada concejal tomará las medidas correspondientes contra los asesores que desvelaron el método para presuntamente blanquear el dinero negro.
“Jamás, jamás he recaudado ningún dinero de forma ilícita, y menos para mi partido”, ha defendido Novo, que ha apuntado que la idea de realizar las aportaciones surgió “ante la necesidad de fondos para llevar a cabo la campaña electoral”. “La decisión se tomó en una reunión en la que no estaba Rita Barberá”, ha expresado, tras revelar que habló con la actual senadora este lunes, nada más levantarse el secreto de sumario de la pieza separada de la 'operación Taula' que investiga el supuesto blanqueo de dinero negro del PP de Valencia. Novo ha pedido al alcalde de Valencia, Joan Ribó, que no destituya a los asesores imputados.