El presidente de la empresa Construcciones Luján, Francisco Javier Luján Morant, ha eludido dar explicaciones este lunes sobre la relación de su mercantil con Ciegsa para la construcción de centros escolares en la Comunitat Valenciana por consejo de su letrado dado que ha recordado que se trata de un asunto que “está bajo investigación judicial”.
El empresario fue arrestado y puesto en libertad en enero de 2016 por una de las piezas derivadas del caso Imelsa, la relativa a la empresa Construcciones e Infraestructuras Educativas S.A (Ciegsa), que todavía se está investigando.
“Lamento no poder contestar a las preguntas, pero siguiendo instrucciones de mi abogado al tratarse de un asunto que se encuentra bajo investigación judicial, no voy a poder realizar ninguna manifestación, pero yo siempre he actuado dentro de la más estricta legalidad”, ha remarcado.
Así lo ha indicado Luján en una comparecencia en la comisión de las Corts que investiga los sobrecostes de más de 1.000 millones de euros en la empresa Ciegsa. Según el informe de Intervención que la Generalitat Valenciana remitió a la Fiscalía, la empresa Construcciones Luján SA habría realizado obras que incrementaron su importe de adjudicación por valor de más de un millón de euros.
Desde Cs le han interpelado por la relación de la mercantil y Ciegsa, si tenía conciencia de que hubiera una trama corrupta en la adjudicación de centros escolares y por su relación con el ex responsable de Ciegsa Máximo Caturla, mientras que Compromís le ha preguntado por si había recibido “presiones” para presentar oferta en las licitaciones de la empresa, si había recibido comisiones y si conocía y se había reunido con el exconseller de Educación, Alejandro Font de Mora, y el expresidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus.
Desde Podemos han lamentado que no pudiera contar “la realidad” de lo que ocurría en la empresa de construcción de centros escolares y le han preguntado por las “desviaciones” de las cantidades entre las licitaciones y el precio final de la obra porque “algo pasaba en Ciegsa que no iba bien”.
Desde el PSPV querían discernir la forma en que se redactaban los pliegos, mientras que el PP ha considerado “una pena” que Luján no haya podido contribuir con sus aportaciones a “clarificar” cuestiones como los modificados de obra, las contrataciones o la liquidaciones. No obstante, Javier Luján ha eludido contestar las preguntas de los parlamentarios.
Asimismo, este lunes ha comparecido en las Corts el exconsejero delegado de la empresa constructora, Germán Luján, quien, a preguntas de los diputados, se ha limitado a decir que él se encargaba de las compras para las obras “y punto”, por lo que no conocía a Máximo Caturla, Marcos Benavent, ni a Alfonso Rus.
“Yo me dedicaba a hacer las compras de la empresa para hacer las obras y no sé nada más. Ni conozco a las personas que me ha dicho”, ha puntualizado. Insistido por la relación de la mercantil con Ciegsa, los pliegos de condiciones, si hubo “presiones” para presentarse al concurso de adjudicación de las obras, comisiones o cómo era el pliego de condiciones, ha reiterado: “Yo llevaba las compras, me decían que hacía falta esto, lo compraba y punto. Si supiera algo más lo diría, pero no tengo nada que ver”, ha remarcado a lo que los diputados han dejado de preguntar.
“Casi imposible” que hubiera una trama
Por otro lado, también ha asistido a las Corts el fundador y presidente de la empresa Torres Cámara y Cía, Juan Francisco Cámara, quien ha indicado que construyó unos 30 centros escolares en una UTE con otra mercantil y ha considerado “difícil y casi imposible” que hubiera una trama corrupta en Ciegsa porque había mucha gente implicada en la firma de los proyectos -entre ingenieros, proyectista y supervisores- y, además, ha defendido que en cada proyecto había un director de obra y un proyectista distinto.
Asimismo, ha negado que en los modificados de obra hubiera irregularidades y, sobre esta cuestión, ha explicado que algunas de las obras que realizaron encarecían su precio final debido a “situaciones técnicas que se producen dentro del proyecto y que no se contemplaban” como pueden ser temas geológicos por el suelo donde se va a construir un centro o porque no hay hormigoneras y se debe de utilizar un hormigón anticongelante que no se pensaba y que es caro.
“Eran costes necesarios para cumplir el objetivo de acabar el colegios”, ha defendido. En este punto e insistido por el incremento del coste de las obras en el colegio Padre Majón de Elda cuyo licitación fue por tres millones y el coste final de 10 millones, Cámara ha explicado que hubo varios problemas durante las obras ya que se tuvo que demoler un edificio que no estaba previsto, realizar una cimentación por micropilotaje y levantar una biblioteca.
No obstante, ha puntualizado que con los modificados, la obra tuvo un coste total de siete millones y no de diez como apuntaba el diputado de Compromís Josep Nadal. Ha defendido que la tramitación de los modificados se hacía “correctamente” y contaba con la aprobación de la administración porque “la ley prohíbe ejecutar modificados que no estén aprobados, al tiempo que también ha puntualizado sobre los pliegos de condiciones de las obras que entiende que estaban ”avalados“ porque se publicaban en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana. Además, ha remarcado que su empresa nunca ha licitado con clientes que ”hagan cosas irregulares“.