La empresa pública Imelsa ha emitido un comunicado después de conocerse que la Fiscalía Anticorrupción ha denunciado ante los tribunales la gestión de su anterior gerente, Marcos Benavent, y en este ha cargado contra la diputada de EU que denunció los hechos, Rosa Pérez Garijo. La empresa de la Diputación de Valencia acusa a la diputada de ser “desleal” con la empresa (ya que forma parte de su consejo de administración), y que al no informar internamente durante medio año ha permitido que se alargara hasta enero la permanencia de Benavent en el cargo.
Así en el comunicado Imelsa afirma que Pérez Garijo “tenía la obligación de darlo a conocer tanto a la justicia como a su consejo de administración”, y que su hubiera informado de estas supuestas irregularidades “se hubieran podido evitar otras posibles anomalías”.
Por ello Imelsa ha atacado en el escrito a la diputada afirmando que buscaba “un rédito político personal”, y que con ello “ha perjudicado claramente a la empresa pública Imelsa y a la Diputación de Valencia y ha propiciado la continuidad del anterior gerente en su cargo durante al menos seis meses”. La empresa pública afirma que “de haber denunciado -Pérez Garijo- ante el consejo la información que tenía, el consejero delegado de Imelsa hubiera actuado, como hizo en enero pasado denunciando las presuntas irregularidades, y se hubiera destituido al anterior gerente de forma inminente, de modo que hubiera evitado que siguiera en su puesto seis meses más”.
No obstante cabe destacar que desde Esquerra Unida se ha denunciado que estas presuntas irregularidades que habría cometido Marcos Benavent “se han dado con el aparente consentimiento y conocimiento de diputados provinciales”.A esto desde Imelsa se asegura que la empresa “desconocía totalmente las supuestas actividades”, y asegura que se pone a disposición del juez “en todo lo que sea necesario”. Además ha añadido la empresa pública que ampliará las denuncias que ya presentó este mes de enero “en defensa de los intereses públicos que Imelsa representa”.
Por otro lado Imelsa también ha anunciado que ha contratado un auditor para analizar la gestión de los años en los que fue responsable como gerente Marcos Benavent, y que “en el caso descubrir anomalías con esta nueva revisión, Imelsa las llevará ante la justicia con la ampliación de las denuncias ya presentadas”.
La empresa pública de la Diputación afirma también que no se ha producido ningún agujero económico en sus cuentas, asegurando que sus cuentas están auditadas y los balances anuales son positivos, por lo que apunta que los presuntos hechos denunciados “se encuentran y se han realizado fuera de las dos instituciones”.
Con todo el comunicado también describen que Imelsa y la Diputación de Valencia “quieren mostrar su indignación y sorpresa por los hechos denunciados y anuncia que hará todo lo posible por reparar el daño económico que se le haya podido hacer a las arcas públicas y a la buena imagen de la que gozan tanto la empresa Impulso Económico Local S.A. como la Diputación de Valencia”.