El PP de Isabel Bonig se ha hundido hasta conseguir el peor resultado de la historia de las elecciones autonómicas valencianas. Con un total de 504.403 votos este ha sido el nivel más bajo de apoyo que se ha situado en el 18,88%, esta cifra es peor que la que obtuvieron los conservadores en 1987, en aquel momento con la candidatura de Rita Barbará bajo las siglas Federación de Partidos de Alianza Popular, que llegó al 23,96%, y un total de 476.099 votos (entonces el cuerpo electoral era menor, y votaron poco más de 2 millones de valencianos, frente a los 2,6 que participaron el domingo).
Pero además también se tocó fondo en las elecciones generales que todavía tuvieron el domingo peores resultados, con 497.669 votos, . Para encontrar peores resultados de una autonomía que ha sido un granero de votos para el PP en las dos últimas décadas, se ha de volver 40 años atrás, a los años 70, a las elecciones a Cortes Constituyentes de 1977 y a la primer legislatura de la democracia de 1979, con 110.716 y 84.316 votos respectivamente.
Otra comparativa sangrante es la medición del PP con el PSPV. Después de que propia Bonig recriminara a Ximo Puig y al PSPV que formara gobierno con los peores resultados de los socialistas en unas autonómicas, ahora el PP han rebasado a la baja dichos resultados, que en 2015 fueron 509.098 votos para el PSPV, superior por solo 4.695 sufragios.
Lo mismo ocurre en las elecciones generales, ya que el PP ha tocado fondo en València con los 497.669 votos, el 18,58% del total, mientras que los peores resultados de los socialistas en la Comunitat Valenciana fueron los de 2015, con 531.489 votos, el 19,95%, cuando el PSOE se vio superado tanto por el PP como por la alianza Compromís-Podemos.