Mazón sube el precio de la vivienda protegida y prevé pisos de 60 metros para jóvenes
La Generalitat Valenciana cede a la presión de los promotores y actualizará el precio máximo de la vivienda pública protegida. Sin llegar al techo que plantearon en su día los constructores, que exigían alcanzar los 2.500 euros por módulo por los elevados costes de las obras, el precio máximo por módulo pasará de 2.200 euros metros cuadrados a 2.400 euros a partir de la entrada en vigor del nuevo decreto anunciado este jueves.
El Ejecutivo autonómico justifica el aumento de precio en la necesidad de incentivar a los promotores para estimular la colaboración público privada, uno de los ejes de la legislatura que avanzó Carlos Mazón al presentar su plan de vivienda. El objetivo del decreto es impulsar la incorporación de 10.000 viviendas de protección pública en la legislatura para contener los precios. “Tenemos que corregir una situación en la que la oferta y la demanda se han desequilibrado por completo y esto afecta con especial virulencia a los jóvenes y a las rentas bajas”, ha afirmado el presidente, que ha denunciado que en los últimos ocho años “el precio del alquiler aumentó en un 90% y el de compra en un 49%”.
El decreto, que se aprobará en las próximas semanas, establece distintos niveles de protección para las viviendas y un sistema de “módulo dinámico”, que prevé diferencias en el precio de la vivienda pública en función de la zona en la que se ubique, su renta media o criterios demográficos. Es una forma de ajustar el precio final a las leyes de mercado y de tener en cuenta los distintos costes de edificación según la zona geográfica, siempre con el umbral máximo fijado en los 2.400 euros. Así, en lugar de un precio homogéneo para todo el territorio, cada promoción de vivienda protegida tendrá sus particularidades reconocidas. La actualización del precio de referencia del módulo se realizará anualmente, de acuerdo a los informes de la Cátedra de Vivienda, según apuntan fuentes de la vicepresidencia de la Generalitat.
El nuevo reglamento también incrementará los umbrales de renta para poder acceder a las promociones protegidas en los casos de las familias que tengan mayores o hijos a su cargo, además de para los jóvenes. Actualmente los ingresos máximos para optar a las viviendas públicas es de 6,5 veces el IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples), calculado en 12 pagas, y pasará a ser el mismo indicador en 14 pagas, con una bonificación de hasta 0,5 veces por cada joven miembro de la unidad familiar. Es decir, una pareja joven podría acceder a una vivienda protegida si no supera los 63.000 euros de renta (7,5 veces el IPREM de 2024).
Reserva de vivienda joven y pisos de 60 metros
El presidente de la Generalitat ha destacado que el decreto establecerá la obligación de que todas las promociones de VPP, tanto públicas como privadas, contengan una reserva mínima del 40% para menores de 35 años. Esta medida ya estaba prevista en el último decreto que firmó Héctor Illueca como conseller de Vivienda en el Gobierno del Pacto del Botánico. Sin embargo, el decreto sí incluye como novedad una categoría de vivienda destinada a menores de 35 años y familias monoparentales, con unas dimensiones concretas -60 metros cuadrados, trastero y garaje-, unos límites de renta y un régimen de protección de 15 años.
El periodo de protección del resto de viviendas será de 30 años para las promociones en suelos calificados para VPP y de 20 años para aquellas promociones que se desarrollen en suelos que hasta ahora se destinaban a la construcción de viviendas libres.
El dirigente popular sostiene que la actualización del precio del módulo, que dejará una vivienda de 90 metros en torno a los 210.000 euros, contribuirá a abaratar los precios al introducir más oferta en un mercado tensionado. Mazón ha garantizado que el módulo variable “siempre garantizará” que el precio de venta para las VPP en la Comunitat Valenciana esté por debajo del de mercado para la venta libre.
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