El PP valenciano ha querido apartarse de su propio pasado y se ha desmarcado sobre la antigua cúpula de Francisco Camps para la que este viernes la Fiscalía Anticorrupción ha pedido casi 8 años de prisión por financiación irregular del partido.
La portavoz de la Generalitat, María José Catalá, preguntada por esta situación, ha afirmado que “respetamos la presunción de inocencia”, pero a continuación recordaba que ninguno de los acusados forma parte de la actual directiva 'popular', y que tampoco son ya diputados en las Corts.
Catalá también considera “inapropiado” la exigencia de la oposición de pedir perdón por esta presunta financiación irregular, y ha pedido que se respeten los tiempos de la justicia. Así la consellera asegura que su partido mantiene “respeto y colaboración máxima” a la justicia, a la vez que aseguraba que las cuentas del PPCV están acreditadas por el Tribunal de Cuentas y que se han sometido a auditorías internas y externas; por ello afirma que en el juicio oral se podrá acreditar la limpieza de su financiación.