Rajoy es recibido en Valencia entre gritos de “corrupto”, “ladrón” y “presidente”
Varios minutos le ha costado al presidente del Gobierno en funciones y candidato del Partido Popular, Mariano Rajoy, recorrer la Plaça de l'Ajuntament de Alfafar (Valencia), donde ha sido recibido este miércoles por una multitud de ciudadanos entre gritos de “presidente”, los más, así como de “ladrón”, “chorizo” o “corrupto”. Un grupo de personas, sobres en mano, también ha simulado la ya famosa escena reproducida en las grabaciones del caso Imelsa de alguien del PP contando presuntamente 'mordidas' al ritmo de “mil, dos mil, tres mil, quatre mil... dos milions de peles”. Y todo ello pese al secretismo de la convocatoria -hasta media tarde del martes el PP no hizo pública la agenda del líder del PP en la Comunitat Valenciana- de este acto de precampaña.
Rajoy, a quien entre grandes medidas de seguridad esperaban además de numerosos seguidores decenas de detractores que le han echado en cara los incontables casos de corrupción que afectan a su partido, ha mantenido una reunión en la Casa de la Cultura de Alfafar con representantes de la Mesa por la Educación en Libertad -representantes de la concertada que el pasado domingo reunía en Valencia a miles de personas-. Previamente, había visitado las instalaciones de Air Nostrum en Quart de Poblet.
Por la libertad de elección
El presidente en funciones, quien ha mantenido la reunión con los portavoces de la concertada en su calidad de dirigente del Partido Popular, como él mismo ha reconocido, ha defendido la libertad de elección de los padres, un derecho “consustancial al ser humano y recogido en el artículo 27 de la Constitución Española”. “Nadie puede pasar por encima de los padres para imponer un sistema educativo determinado”, ha dicho.
Así ha defendido el sistema educativo español, basado en la enseñanza pública y en la concertada, “que supone el 25% y en España cuenta con dos millones de alumnos” porque aporta “pluralidad, libertad y calidad. Lo que funciona bien [la concertada] no se cambia”. A su juicio, no es buena la “escuela única”, al tiempo que lanzaba un mensaje a los dirigentes valencianos a actuar “con responsabilidad” y respetar la libertad de elección de los padres, huyendo de la “radicalización, los extremismos y los prejuicios ideológicos”.
Reunión “cordial y muy intensa”
Vicente Morro, portavoz de la Mesa por la Educación en Libertad, destacaba este encuentro como “cordial, intenso y muy productivo” tras los “ataques” que aseguran vienen sufriendo en los últimos meses desde el Consell con cuestiones que atentan contra la libertad de elección de centro, “como el arreglo escolar, la eliminación del distrito único o la eliminación del decreto de admisión”.
Desde la concertada le han hecho llegar al presidente en funciones sus propuestas, “estamos ante una cuestión de derechos y libertades que queremos que se respeten”. En su opinión el ejecutivo valenciano, con las últimas medidas aprobadas, pretende “un trasvase de alumnos de la concertada a la pública”. “Tienen la voluntad decidida de modificar el estatus actual convirtiendo la educación concetada en subsidiaria y residual”, ha afirmado.
