La historia es como un boomerang que siempre vuelve con efecto. El polígono proyectado para compensar el cierre de la siderurgia valenciana en la traumática reconversión industrial acogerá una factoría que será motor para la transformación energética. La gigafactoría de baterías que Volkswagen, grupo que compró a la española Seat en la reconversión de los ochenta pilotada por el Gobierno del PSOE, ubicará en la localidad valenciana de Sagunt aspira a convertir la región en el buque insignia de la reindustrialización autonómica.
La capital del Camp de Morvedre, polo industrial entre los setenta y los ochenta con los Altos Hornos, albergará una planta de fabricación de baterías para coches eléctricos para la que la multinacional invertirá entre 2.500 y 3.000 millones de euros en el marco de su plan de electrificación en las factorías españolas. La ubicación en los terrenos de Parc Sagunt II, la segunda fase de recuperación de suelo industrial, a pocos kilómetros de Almussafes, pretende convertir el entorno de Valencia en un polo del motor eléctrico.
El enclave industrial tiene capacidad de crecimiento si se aprovechan bien las infraestructuras cercanas por carretera, mar y vías ferroviarias. “Si somos capaces de hacer las infraestructuras necesarias, Sagunto será el polígono moderno del Mediterráneo”, afirma Rafael Climent, conseller de Economia Sostenible e Industria del Gobierno valenciano. Sagunto cuenta con puerto propio, que se posiciona como alternativa a la ampliación Norte del Puerto de Valencia; al campus de la Universitat Politécnica de València y tiene conexión ferroviaria con Zaragoza, mientras se trabaja en las mejoras del Corredor Mediterráneo y el Corredor Cantábrico, que conectarían la factoría con el resto de plantas de la multinacional en Pamplona y Martorell.
Para la instalación necesitan cumplirse una serie de acciones, ubicadas en el calendario de la multinacional y del Ejecutivo autonómico. La primera, la finalización de la expropiación de los terrenos de Parc Sagunt II. El polígono industrial Espacios Económicos Empresariales SL (EEE) es una sociedad participada a medias por el Gobierno valenciano y SEPIDES (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales y Desarrollo Empresarial) y el Gobierno autonómico prevé que se culmine la expropiación en junio. La segunda, que la multinacional cumpla los criterios para obtener las ayudas previstas en el PERTE de vehículo eléctrico. del Ministerio de Industria, que canaliza los fondos europeos.
Aunque crecimiento sostenible e industria del motor parece un oxímoron, el dirigente de Compromís defiende que la factoría generará empleo de calidad y cree que la industria es el sector que “más y mejor” empleo genera. De forma directa, el grupo Volkswagen afirma que creará 3.000 puestos de trabajo en la planta valenciana. De forma indirecta, el Ejecutivo valenciano lo cifra en 10.000, con la generación de un 'efecto tractor' sobre la factoría Ford de Almussafes -los americanos han suscrito convenios recientemente con los alemanes- y sobre la industria auxiliar.
“Todo el sector de la automoción levanta la cabeza después de un tiempo mirando al suelo”, afirmaba el conseller en una entrevista en À Punt Notícies. “Esto le da un impulso a la factoría Ford. A ver si en Detroit ven por fin la capacidad que tiene para el coche eléctrico y con una gigafactoria que se puede sumar a la cadena de valor y ayuda a reactivar toda la empresa auxiliar”, ha concluido el titular de Industria.