El vicealcalde de Valencia, Alfonso Grau (PP), ha pedido al juez del caso Nóos, José Castro, el sobreseimiento libre de la causa en lo que a él afecta, con lo que dejaría de estar imputado en la misma.
Grau, presidente de la Fundación Turismo Valencia Convention Bureau (FTVCB), prestó declaración como imputado ante el juez Castro el pasado 31 de mayo, en relación con los convenios firmados entre dicha entidad y el Instituto Nóos para organizar tres foros sobre eventos deportivos, las cumbres Valencia Summit de 2004 a 2006.
El magistrado ha dictado hoy una providencia en la que da cuenta del escrito que ha presentado Grau y lo traslada a la Fiscalía y las demás partes personadas, a quienes da tres días para que se pronuncien sobre la petición de archivo si lo estiman pertinente.
Grau es la última persona que ha declarado como imputada en esta causa que investiga el presunto desvío de fondos públicos al Instituto Nóos que presidió Iñaki Urdangarin.
En su declaración ante el juez, Grau aseguró que la FTVCB es una entidad privada que no está sujeta a los controles de contratación de las administraciones públicas y defendió que se contrató al Instituto Nóos para organizar los tres eventos porque lo presidía Urdangarin.
Grau aportó además siete documentos para respaldar su posición de que la FTVCB es una entidad privada. Castro citó a Grau a declarar como imputado al apreciar “indicios fundados de criminalidad” en los convenios suscritos entre Nóos, la FTVCB y la Ciudad de las Artes y las Ciencias SA (Cacsa)
En otra providencia, Castro también ha dado traslado de la petición de sobreseimiento libre por parte del ex director general de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia (Cacsa), José Manuel Aguilar, y da a las partes personadas tres días para presentar las alegaciones que estimen pertinentes.
Por otro lado, el juez ha dado traslado a la Audiencia de Palma del recurso de apelación del sindicato Manos Limpias contra su decisión de no realizar una prueba caligráfica de las firmas de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina que figuran en las actas de la empresa Aizoon.
Manos Limpias reclamó al juez esta prueba caligráfica al considerar que la instrucción del caso Nóos no puede culminar con “flecos sueltos” como las dudas sobre la autenticidad de esas firmas, que podrían tener consecuencias jurídicas en el juicio oral.