El PP perdería la mitad de sus escaños en las Corts Valencianes, pasando de sus actuales 55 diputados a 28. Es el escenario que pronostica una encuesta de intención de Voto publicada este domingo por El País. Pero este descalabro sería todavía mayor en el Ayuntamiento de Valencia donde Rita Barberá pasaría de tener los 20 concejales de ahora a tener 8. Frente a este desplome de los 'populares' destaca el crecimiento exponencial de Ciudadanos que recoge la mayor parte de la sangría del PP, así en las Corts debutaría con 17 diputados (llegando a ser la tercera fuerza más votada), y en el consistorio empataría con el PP con 8.
Con estos resultados el PP está muy lejos de la mayoría absoluta en ambas instituciones, y no le llegaría para mantenerse ni con un pacto con ciudadanos en las Corts, ya que sumarían 45 diputados, cuando la mayoría la marcan los 50 escaños. En Valencia este pacto rozaría la mayoria absoluta, pero todavía sumarían un concejal las fuerzas progresistas.
Desglosados los números en las Corts se advierten cuatro partidos que aglutinan la mayoría de los votos: PP 28 escaños (pierde 27), PSPV 23 (pierde 10), y debutan con 17 parlamentarios cada uno Ciudadanos y Podemos. Más lejos quedan Compromís con 9 (sube 3 escaños) y EU con 5 (mantiene los mismos representantes). UPyD volvería a quedarse fuera del arco parlamentario.
Con esta configuración los pactos serán inevitables para configurar el próximo gobierno de la Generalitat. La suma PP-PSPV vendría justa para conformar una mayoría absoluta (51 diputados); por otro lado sería posible un gobierno cuatripartito entre PSPV, Podemos, Compromís y EU, aunque con piezas recambiables con Ciudadanos, que podría sustituir a Podemos o incluso a la pareja Compromís-EU.
Por lo que respecta a la ciudad de Valencia la característica fundamental es la atomización: ningún partido llega a los 10 concejales. El PP consigue 8 ediles (pierde 12), Ciudadanos debuta empatando como fuerza más votada también con 8, Valencia en Comú -marcar integrada por Podemos- se alza como tercera más votada con 6, el PSPV cae a la cuarta fuerza con 5 concejales (pierde 3), Compromís llega a los 4 ediles (sube 1) y EU se mantiene con 5 concejales.
La ciudad de Valencia mantiene de este modo un espectro más conservador en su composición que lo sitúa a las puertas de la mayoría absoluta, pero los partidos progresistas, pese a estar más fragmentados (4 fuerzas en total) todavía alcanzan por un concejal la mayoría. Un posible pacto PP-PSPV sería inútil en este caso, el bipartidismo queda destrozado en el consistorio valenciano.