El PP, según una encuesta publicada hoy por el diario El País, perderá la mayoría absoluta. Los populares, al frente de la Generalitat Valenciana desde 1995, obtendrían 34 diputados en las próximas elecciones autonómicas, a celebrar en mayo de 2015. Los populares, tocados por el paro y la corrupción, los dos problemas que más preocupan a los votantes, perderían, a a día de hoy, 14 escaños.
El PSPV-PSOE, siempre según la encuesta hecha por Metroscopia, también bajaría, de 33 a 27 escaños, pero el empuje de Compromís, que dobla sus escaños (de 6 a 13) y el fortísimo ascenso de Esquerra Unida (de 5 a 13), hacen factible un gobierno de izquierdas en la Comunidad Valenciana: Estas tres fuerzas sumarían 53 escaños. La mayoría absoluta en las Cortes Valencianas requiere de 50.
La encuesta revela que UPyD, actualmente sin representación, obtendría hasta 5 diputados. Ni siquiera contando con un eventual apoyo de la formación de Rosa Díez, el PP sumaría los apoyos necesarios para gobernar en la Comunitat Valenciana por sexta legislatura consecutiva.
Sin grandes cambios
La foto electoral no ha cambiado mucho desde hace un año, siempre según el trabajo de Demoscopia para El País. El PP, pese a que el deterioro de la situación política y social continúa, detiene su caída ya que sólo pierde un escaño con respecto a octubre de 2012.
Los socialistas, al mando de Ximo Puig, mejoran levemente. Obtendrían dos diputados más que hace un año (27 por 25) y mejoran en algo menos de cuatro puntos (hasta el 23,6%) su intención de voto. A pesar de ello, siguen lejos de su suelo electoral, marcado en las autonómicas de 2011 con 33 diputados y un 28% de los sufragios.
Desafección política
La participación electoral caerá ocho puntos con respecto a la de 2011, hasta el 63,7%. Compromís y EU, que consolidan sus espectaculares ascensos, se benefician de la desafección política y la pérdida de votos de los dos grandes partidos por su relación con la corrupción y su responsabilidad en la gestión de la crisis. UPyD, que bajaría un escaño con respecto a la encuesta de 2012 (de 6 a 5), también se beneficia de este fenómeno.
Suspensos para todos
El 71% de los encuestados suspenden sin paliativos la labor “mala o muy mala” de Alberto Fabra y todo su gobierno. El presidente es puntuado con un 3,9 (de cero a 10) en línea con las calificaciones que reciben gran parte de los consellers, por otra parte, unos perfectos desconocidos para la ciudadanía.
El vicepresidente José Ciscar (conocido por el 45% de los encuestados) y el conseller de Sanidad, Manuel Llombart, son los mejor calificados con una nota de 4,1. Ahora mismo, tras años de vender las bondades de una comunidad líder y próspera, pocos creen en el PP: sólo un 18% cree que este partido defienda la Comunidad Valenciana.