El PP volverá a pedir la documentación de la conselleria de Economía Sostenible y Sectores productivos para inspeccionar línea por línea el grado de ejecución presupuestaria de 2016. Rafael Climent, quien dirige esta cartera, es uno de los consellers más cuestionados dentro y fuera de les Corts. A fecha de 30 de septiembre, su departamento no había repartido ni un euro de lo presupuestado en algunas líneas como la de promoción de la economía sostenible.
Tres portavoces de economía, comercio e industria del Grupo Popular han ofrecido una rueda de prensa para hacer balance de su gestión. A su juicio, 2016 ha sido “un año en blanco”, ya que hay aproximadamente 25 líneas del presupuesto para las cuales no se han publicado las órdenes y otras tantas que lo han hecho a final de año, por lo que según el PP, “no ha dado tiempo a resolver y pagar las ayudas”.
El representante de Comercio del PP, José Salas, ha sido de los más duros con el conseller. En sus palabras, Climent amenaza a los grandes comercios, da falsas esperanzas al pequeño comerciante, mantiene una batalla con los horarios comerciales y pretende “cargarse” un modelo que ya funciona, además de haber enterrado el proyecto Puerto Mediterráneo.
Por su parte, Vicente Casanova, portavoz de industria, ha criticado las ayudas “arbitrarias” que se otorgarán el próximo año para las comarcas de Els Ports, Vall d'Albaida y El Maestrat, en lugar de abrir las ayudas a que todos los ayuntamientos presenten proyectos y se seleccionen por concurso. Destaca además que para el próximo presupuesto se prevean otorgar 83 millones de euros en líneas nominativas.
Por ello, los populares consideran que el Consell ha castigado a Climent con la creación de la Agencia Valenciana de Innovación, que acapara parte de las competencias de su departamento -como la adjudicación de subvenciones que realiza el IVACE- , y para la que se prevé un presupuesto de 105 millones de euros hasta 2019.