La Generalitat alerta a los ciudadanos de Castellón para que no salgan de casa y se refugien en “zonas altas”

La gota fría que ha asolado Valencia dejando un centenar de muertos se desplazaba este jueves por la mañana con fuerza a la provincia de Castellón, donde han caído hasta 213 litros por metro cuadrado en localidades como Tírig y se han desbordado barrancos. Aunque el territorio ha pasado horas en alerta roja, el aviso ya se ha rebajado a amarillo.

Los avisos de peligro empezaron en la madrugada, cuando la AEMET anunció en Twitter que las precipitaciones podían ser intensas y a partir de ahí se han ido actualizando hasta que llegó la alerta roja. El aviso a los móviles, gestionado por el ejecutivo autonómico, ha sonado a media mañana, a las 11.50 horas. En ella se pedía a los ciudadanos no salir de casa y, en caso de ya haberlo hecho (por la hora ya estaban los centros de trabajo llenos y muchos centros escolares), refugiarse “en zonas altas”. AEMET ha rebajado la alerta a amarilla desde las 14.06h.

El aviso a los móviles también insiste en que no se circule por las carreteras, ya que hay torrentes de agua circulando hacia la planicie de la zona de Torreblanca y Cabanes. Las zonas más afectadas son l'Alt Maestrat, el Baix Maestrat, els Ports y la Plana Alta. Actualmente, se encuentran cortadas la CV-137 de Càlig a Sant Jordi; CV-200 en el tramo que une Aín con Almedíjar; CV-130 Albocàsser-Sant Mateu por Tírig; CV-154 Torre Endoménech-La Serratella; CV-1486 entre los términos de Cabanes y Oropesa; CV-148 en Borseral; y CV-15 en La Pelejaneta (Vall d’Alba).

Ha llovido mucho en las cabeceras de ramblas, barrancos y ríos como Cervera, Coves, Cèrvol y Sènia, y estos pueden experimentar crecidas súbitas e importantes de caudal mientras en la costa no llueve, pero puede recibir todos esos desbordamientos, especialmente Benicarló, y los expertos avisan de que puede repetirse el patrón de Valencia, que ha dejado municipios anegados y un centenar de muertos. Entre Benicarló y Càlig, donde ha caído una tromba de agua y se ha desbordado la rambla de Cervera, hay trabajadores atrapados en una fábrica y también se ha caído una torre de telecomunicaciones, además de que las carreteras están cortadas.

Algunos ayuntamientos habían anunciado la suspensión de las clases esta mañana, como Peníscola, Torreblanca, Vall d’Alba, Vila-real, Orpesa o Segorbe, pero la decisión consensuada y la alerta de no moverse ha llegado cuando los centros de trabajo y centros educativos estaban ya llenos. Es competencia de los ayuntamientos suspender las clases en infantil, primaria y secundaria, aunque desde la Conselleria se puede instar a hacerlo, cosa que no ha sucedido. La Universidad Jaume I de Castelló ha suspendido sus clases esta mañana, cuando algunos de los alumnos estaban ya de camino.

La decisión de alertar masivamente a la población se ha tomado en el Cecopi, el Centro de Coordinación Operativo Integrado que ha asumido el mando de la situación, donde están representadas todas las administraciones y donde esta mañana se ha recibido la visita del presidente del Gobierno y de Alberto Núñez Feijóo.

Bomberos del Consorcio Provincial de Castellón han rescatado a una persona en la zona de Vilafamés afectadas por las lluvias torrenciales que registra este jueves la provincia castellonense y trabajan en el rescate de otra persona que está en una caseta de campo en Sant Mateu.

Mientras se intentan contener los daños en la provincia de Castellón, continúan las labores de rescate de cuerpos en Valencia y centenares de vecinos de toda la zona afectada por las inundaciones, como Catarroja o Paiporta siguen sin suministros básicos como agua, comida o medicinas.