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Sombra de prevaricación y malversación en el Puerto de Valencia

Rafael Aznar, en el Puerto de Valencia.

Voro Maroto

El presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Rafael Aznar, ha declarado durante más de 6 horas ante el juez imputado por los supuestos delitos de malversación de fondos públicos y prevaricación.

La Fiscalía, tras más de un año de investigación, cree que en el puerto, controlado por el gobierno central y la Generalitat, se pueden haber dado varios casos de nepotismo, despilfarro y corrupción. Aznar asegura que se actuó siempre conforme a la ley y niega cualquier irregularidad. Estos son algunos de los hechos investigados, que podrían haber supuesto un quebranto de hasta 44 millones de euros.

Despilfarro y nepotismo en la Fundación

El Puerto gastó más de 2.5 millones de euros en varias fundaciones. La Fiscalía cree que la contratación del personal se hacía sin concurso público alguno y que algunos sueldos –tres directivos de ValenciaPort cobraban más de 120.000 euros al año- estaban totalmente fuera de mercado.

Pagos irregulares en una empresa controlada

La Fiscalía también denuncia cobros irregulares de Aznar y otros directivos del puerto en una empresa bajo su control, Plataforma Intermodal Logística, encargada de gestionar la zona de actividades logísticas que en su día arrasó parte de la huerta de La Punta, en las afueras de Valencia. Los aludidos aseguran que ha devuelto el dinero.

Trato de favor con empresas contratistas

La investigación también intenta aclarar si Aznar privilegió en alguna de sus contrataciones a Cyes, la constructora para la que trabaja un hijo del presidente del puerto y en una de cuyas viviendas –de alto standing- vive, de alquiler, él mismo. Cyes, en unión con otras empresas, ha logrado encargos por más de 300 millones de euros del puerto.

Operaciones extrañas con la Fórmula 1

La Fórmula 1 en Valencia discurría parcialmente por el puerto, para lo que se construyó un puente en el recinto. Costó 3 millones de euros. Debía ser sufragado por Valmor, la empresa privada a la que Generalitat concedió la organización del gran premio. El puerto adelantó el dinero y perdonó gran parte de la deuda con la empresa, rescatada por el gobierno valenciano.

Además, la acusación pública también cuestiona la compra masiva de entradas para la Fórmula 1, que fue un fiasco de público.

4 millones por un yate

El puerto gastó 4 millones de euros en un yate con el que agasajar a sus invitados durante la Copa del América de vela y después. El coste del mantenimiento anual de la embarcación es de 400.000 euros. Antes de 2007, se alquilaba una nave similar por 150.000. La investigación parte de la premisa de que los precios abonados no tienen justificación.

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